Los fuertes vientos e intensas lluvias causados por el huracán María, cuyo ojo se ha alejado del territorio nacional, causaron daños de consideración en las zonas este, noroeste, nordeste, norte y Cibao central, con centenares de viviendas dañadas, cultivos arrasados o anegados, acueductos inhabilitados y localidades incomunicadas.
El volumen de agua que ha caído sobre esas regiones ha saturado los suelos, afectados anteriormente por torrenciales aguaceros provocados por el ciclón Irma, lo que ha causado desbordamientos y crecidas de ríos, arroyos y cañadas sobre zonas habitadas y extensos predios agrícolas y pecuarios.
Las autoridades han advertido sobre la continuidad de las lluvias, aunque con menor intensidad, lo que eleva el riesgo de más inundaciones y destrozos en infraestructuras urbanas y rurales, por lo que se requiere que la población siga atenta a las recomendaciones de la Centro de Operaciones de Emergencias (COE).
El Gobierno está compelido a iniciar de inmediato el operativo de reconstrucción o reparación de los daños mayores causados por el huracán, en un abordaje armónico sobre males mayores y menores, porque se debe tomar en cuenta que en todos los casos la afectación recae sobre la ciudadanía.
Gobernadores, senadores, diputados, alcaldes y regidores no pueden ni deben apartarse ni por un instante de sus respectivas comunidades a las que están compelidos a asistir, así como a representarlas en los reclamos de auxilio o asistencia.
En vez de sentarse a esperar la ayuda oficial, los legisladores deberían utilizar los mencionados fondos del “barrilito” en la rápida adquisición de madera, planchuelas de zinc, materiales de construcción para ser distribuidos entre familias cuyas viviendas resultaron severamente afectadas por vientos o inundaciones.
Conviene que gobernadores y alcaldes se alejen de micrófonos y cámaras y se acerquen más a sus comunidades que urgen de inmediata asistencia ante los daños infligidos por el huracán, cuyo rápido abordaje no admite excusas ni justificación.
Se da por descontado que los ministerios de Obras Públicas y Agricultura inician desde hoy mismo un extenso operativo de reconstrucción o reparación de carreteras, caminos vecinales y puentes, así como de rehabilitación de predios agrícolas, granjas y hatos afectados por el meteoro.
Aunque las lluvias continuarán durante el fin de semana, el ciclón se ha alejado y llevado consigo sus fuertes vientos, por lo que el Gobierno debe emprender el programa de reconstrucción tan rápido y acelerado como sea posible, en el entendido de que hay recursos, voluntad y capacidad para retornar al país a su normalidad.
