Se intensifican los aprestos en el Congreso Nacional para modificar la Constitución en busca de permitir restablecer la reelección con el propósito de que el presidente Danilo Medina tenga la oportunidad de presentarse nuevamente como candidato en las elecciones del 2016.
De acuerdo a informes confiables, los legisladores peledeístas le han agregado un “atractivo” a esa modificación y es tratar de lograr el compromiso de las cúpulas de los partidos para repostular a los actuales senadores y diputados.
Uno de los tropiezos que tendría esa iniciativa es que congresistas del PLD que seguían al mandatario están inconformes con el trato que dicen les ha dado su gobierno y se han pasado a la acera del expresidente Leonel Fernández.
Los danilistas argumentan que el PLD no puede darse el lujo de poner en peligro su continuación en el poder con otro candidato que no sea Medina.
Apelan a que todas las encuestas dan al mandatario una aprobación a su gobierno por encima de un 80 por ciento y con intención de votos si decide repostularse con más de un 60%.
Aducen que las acusaciones contra Fernández y sus colaboradores por actos de corrupción, es un obstáculo difícil de superar por el ex mandatario.
Popularidad
Los adeptos de Fernández sostienen que la popularidad de Medina es fruto de un buen trabajo mediático que necesariamente no se refleja en votos.
Afirman que a lo interno del PLD, Fernández estaría por encima de Medina, “porque las bases peledeístas están desempleadas y pasando trabajo”.
Sin la aprobación de Fernández no se produciría una modificación a la Carta Magna, porque faltarían más votos.
Para aprobar las enmiendas a la Constitución se requiere el voto de las dos terceras partes de los 222 miembros que integran la Asamblea Nacional que son 149 miembros, el PLD tiene 128, le faltan 21.
Candidato
Legisladores de Fernández sostienen que el ex mandatario está obligado a ser candidato ahora, porque de lo contrario no tendría futuro.
Avalan esa afirmación en que Medina con el poder saldría beneficiado con las candidaturas congresuales y municipales.
Además, que en el 2017 vencen los plazos para los cuales fueron escogidos los actuales miembros de la Suprema Corte de Justicia (SCJ), el Tribunal Superior Electoral (TSE) y la Junta Central Electoral (JCE) y por eso Fernández no estaría blindado con el poder judicial. Sostienen que la conformación de una nueva justicia, podría iniciar acciones en contra de Fernández y sus colaboradores.
