La restauración y rescate del teatro Agua y Luz fue otorgada a dos arquitectos dominicanos que participaron, hace años, en el concurso abierto por el Ayuntamiento del Distrito Nacional, como parte de un proyecto general de restauración del Centro de los Héroes.
La propuesta ganadora fue de los arquitectos Gustavo Moré y Daniel Pons, informa Omar Rancier, dirigente del grupo Nueva Arquitectura.
Esa propuesta ganadora no se ha ejecutado. El Nacional está tratando de obtener una versión oficial del Ayuntamiento del Distrito Nacional.
Rancier abundó en información histórica sobre el proceso del teatro Agua y Luz.
Refirió que el diseño es del ingeniero catalán Carles Bohigas Sans, quien se había destacado como creador de fuentes ornamentales.
Además argumentó que se debe dar seguimiento a los resultados de ese concurso de manera consistente y que intervengan las autoridades de Turismo y Cultura.
El Agua y Luz se planteó como un hito arquitectónico con una fuente espectacular, y que en ese momento (1955) era única en el mundo. Con su planta oval y su gran espacio a cielo abierto, constituía una tipología de sala de espectáculo que aparecieron principalmente en el Caribe y México y que trataban de rescatar el cielo tropical como parte del espectáculo y la Arquitectura. En Cuba es famoso aún El Tropicana, diseño de Max Borges uno de los más importantes arquitectos modernos de la Cuba pre-revolucionaria.
Un apunte
Una voluntad
Rancier sostiene que para sacarlo de la situación de ruinas ha hecho falta una voluntad que permita rescatar no solamente al Agua y Luz si no a todo el centro histórico y administrativo del Centro de los Héroes.
