Santiago. Aunque es un veterano en la liga invernal, Erick Almonte confesó anoche que estaba ansioso por despertar con su bate y rendirle a su nuevo equipo, las Aguilas Cibaeñas.
Almonte vino desde la banca y pegó doble y hitcon cuatro remolcadas, para conducir a las Águilas Cibaeñas al triunfo 10-4 ante los Tigres del Licey, en juego a casa llena celebrado en el Estadio Cibao.
En esa situación sabía que ellos estaban obligados a pitchearme. Fui a buscar un lance sobre el plato y lo logré, me siento contento porque al fin he podido rendirle a este equipo que me trajo en un momento especial de mi carrera, dijo Almonte.
Almonte bateó de emergente por Efrén Navarro, con las bases llenas en el sexto, y dio doble de tres anotaciones que puso a las Águilas arriba 6-4, ventaja que jamás perdieron. En el octavo dio sencillo remolcador al central.
El otro héroe del juego para las Aguilas fue el lanzador de relevo Ángel Castro, quien sustituyó al abridor Miguel Batista en el quinto y lanzó 5.0 entradas de tres hits sin carreras permitidas y dos ponches, para anexarse su tercer triunfo de la campaña.
La derrota fue para Marino Salas, tercero de 10 lanzadores del Licey.
El secreto fue mantener la bola bajita, eso provocó que me batearan muchos rodados, estoy contento, porque hemos ganado en equipo, la ofensiva estuvo ahí y los lanzadores también hicimos el trabajo, comentó el serpentinero Castro.
En Números
4
Remolcadas
Tuvo el veterano Erick Almonte, con doble y sencillo bateando de emergente.
