El sector de la pequeña y mediana industria lanzó este domingo un llamado de alerta sobre el peligro institucional que implica la cualquierización del ejercicio político en el país, el transfuguismo, el barrilito y el uso de recursos públicos en campaña.
En una declaración conjunta, la Asociación de Empresas Industriales de Herrera (AEIH) y la Federación de Asociaciones Industriales (FAI), definieron como un triste espectáculo y una ignominia el activo cambalache de militantes entre los partidos políticos que, al estar movido por las prebendas, le crea pasivos al presupuesto y a las finanzas públicas.
Es lastimosa la presteza con la que connotados dirigentes políticos realizan juramentaciones públicas de tránsfugas y ensalzan a personajes sin identidad política, que andan errantes en busca de la sombrilla más conveniente para succionar las tetas del Estado, manifestaron.
Dijeron que el caos en las definiciones de candidatura y las suplantaciones de aspirantes son señales preocupantes de un proceso de selección que no toma en cuenta los intereses del país, sino al negocio político y al corporativismo partidario.
La AEIH y la FAI hicieron un llamado al empresariado decente, a las organizaciones de la sociedad civil aun no contaminadas y al segmento de la dirigencia partidaria que cree en la política como un servicio, a reclamar la aprobación de la Ley de Partidos Políticos, la eliminación del barrilito de los legisladores y a poner fin al sistema de piñata causado por el clientelismo.
Las organizaciones empresariales también instaron a poner en marcha fuertes mecanismos de control y vigilancia de los capitales dudosos que se mueven en ciertas esferas del poder político, los cuales crean compromisos de impunidad y de complicidad para violar las leyes sin mayores consecuencias.
Nos avergüenza la cualquierización del ejercicio político. La clase política, con honrosas excepciones, entra en un proceso de degradación, creando condiciones para el descalabro de las instituciones, atentado contra todos los valores éticos y apuntando al caos, señalaron las entidades empresariales, presididas por Manuel Cabrera e Ignacio Méndez, respectivamente.
Proclamaron que nunca antes se había visto entre los partidos una vocación tan marcada en convertir al país en un botín político y advirtieron que tampoco tiene precedente la formación de grupos políticos cada vez más independientes y poderosos en términos financieros.
Esto lleva a la nación por un camino malo y peligroso que conduce al despeñadero. Se requiere una movilización ciudadana que evite eso y que adecente el ejercicio de la política en el país, expusieron la AEIH y la FAI.
