Abuso emocional
Martha Díaz médica, madre, psiquiatra es, además, un ser humano sensible que conoce y practica el darse a los demás, que al decir de los que se dedican a filosofar eso es sinónimo de amor, y cumpliendo con ello ha parido un hijo, la segunda edición de su libro, que es un hermoso acto de amor, porque va dirigido a los que sufren y se encuentran atrapados en ese enemigo silente que es el abuso emocional.
Una bella edición, que ella prefiere llamar ampliada, de Editorial Manatí, presentando en la portada una exuberante Rosa de Bayahibe, nuestra flor nacional, en su discurrir de 256 páginas noslleva de la mano sobre un tema que ocultamos, que nos negamos a reconocer aún seamos víctima de él, y peor aún su causante: El abuso emocional, sin embargo está ahí, omnipresente, arropándonos a todos, dañándonos, limitándonos en nuestra búsqueda de la felicidad.
Desde la primera frase hay un mensaje categórico: “Ninguna forma de abuso emocional está justificada, todas dejan dolorosas secuelas…”. De inmediato plantea el eje de todo el libro, lo que pasará transversalmente por todo el contenido, en los 31 temas enlazados como capítulos en una secuencia lógica con un adendum que es el 30 que puede y debe ser el tratamiento ideal para todo aquel que se ha visto atrapado en la vorágine de este enemigo callado: “Seguir Adelante”, y que ilustra una figura en la página 248 que lo dice todo: una mujer abrazándose a la imagen que le devuelve el espejo; por si quedara alguna duda la escritora remacha: “Empoderarse, tomar la dirección de su vida… tener la capacidad de vivir la vida plenamente con amor por sí misma”. Esa es la raíz de todo, que sabiamente Martha nos revela en el mismo primer capítulo al desglosar lo quesignifica para una persona “…haber crecido con carencias afectivas que le lleva a desarrollar falta de empatía, inmadurez… candidato a propiciar abuso emocional”.
