Accidentes y Fidel II
El trabajo que lleva este mismo nombre se publicó previo a la navidad del año pasado y decíamos: “Para estas fechas se despenaliza el horario de venta de bebidas alcohólicas y se bebe sin freno, no hay regulación de las autoridades a los que además de conducir toman alcohol. Somos, sin que sea para enorgullecerse, el primer país del mundo en muertes por accidentes de tránsito.
Recién le remití cartas separadas al presidente Danilo Medina y a su Ministro de la Presidencia para que me designasen al frente de una Comisión Especial, mediante una Política Pública de Salud, similar a la instaurada en Cuba y que con excelentes resultados han copiado colombianos y costarricenses. Sería una Comisión con absoluto poder para establecer programas que permitan cumplir las normas y leyes de tránsito con respaldo de las autoridades locales y ninguna interferencia desconocedora de autoridad alguna. No me han respondido”.
Tres meses después le remitimos otra carta al Presidente y al Súper Ministro: “Tenemos a bien reiterarle nuestra disposición a encabezar una Política Pública de Salud para la Prevención de Accidentes de Tránsito, ahora que se ha aprobado un organismo que unifica este campo”. Tampoco me respondieron y anteayer aparecieron las designaciones en el nuevo organismo, políticos reciclados que van a reeditar las mismas inconsecuencias que han convertido nuestro tránsito en un caos y la peor epidemia del país.
El pasado diciembre acotamos: “Cuba es de los países del continente con menos accidentes de tránsito,y de más baja tasa por muerte en ellos, y eso es el resultado de la construcción de Políticas Públicas efectivas que son acatadas por todos conscientemente.
Recuerdo que yendo en autobús de Santiago de Cuba a La Habana, en 2006, en par de ocasiones el chofer optó por esperar el momento oportuno para rebasarle primero a una bicicleta y luego a una carreta. No es casualidad, ni es simplemente por Fidel, es por mantenerse fieles a los principios y a las leyes que si son“algo más que salud”.
