¿Qué Pasa?

Entre el cielo y tierra

Entre el cielo y tierra

Mary Leisy Hernández

Dominicanidad en Brasil
Brasilia, Brasil.- El ritmo de la tambora y la guira dominicana brilló en la capital de Brasil, en medio de un concierto de la Orquesta Sinfónica del Teatro Nacional de Brasilia, en el que participó como solista la destacada flautista dominicana Evelin Peña Comas y como invitado especial el percusionista Rafael Díaz Castillo.

Fue una noche de dominicanidad, auspiciada por la Embajada dominicana en coordinación con la Secretaría de Cultura del Distrito Federal. La orquesta que dirige el maestro Claudio Cohén interpretó composiciones de grandes músicos dominicanos intercaladas con piezas de reconocidos clásicos de la música. “Yaya” del Maestro José Antonio Molina dio inicio a la noche y para concluir fue escogida la Suite Macorix de Bienvenido Bustamente con las piezas Atardecer, Nostalgia y Fiesta dos Guloyas.
La flautista dominicana de trascendencia internacional por su parte, interpretó el concierto para flauta e Orquesta Op 283 de Carl Reinecke. Con su sensibilidad y gran profesionalidad, la joven artista Arrancó fuertes aplausos a un público compuesto por personalidades de diferentes nacionalidades. Los aplausos la invitaron a volver a escena, y esa vez para interpretar una conocida pieza brasileña, con la que volvió a arrancar fuertes aplausos al público que se congregó esa noche en la gran sala del Cine Brasilia. Uno de los momentos más dominicanos de la noche fue, cuando el maestro Cohén solicitó al percusionista Díaz que mostras a Brasil como suenan los instrumentos más utilizados para tocar merengue y otros ritmos dominicanos. Fue el momento idóneo para que la tambora hablara de lo más autóctono de la música de ese país caribeño.

Brasil, un país de gran riqueza musical, tuvo en ese concierto la oportunidad de conocer varias vertientes de nuestra música, nuestros artistas y compositores. Al final como regalo extra por los aplausos, la orquesta interpretó un tema de Juan Luis Guerra muy conocido por buena parte de los presentes y así, maravillosamente, terminó una noche de música dominicana y dominicanidad, gracias a las gestiones de la misión dominicana en Brasil encabezada por el Embajador Alejandro Arias Zarzuela.

El Nacional

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