VILLA ALTAGRACIA. El administrador y un empleado de la estación de combustible Unigas, ubicada en el kilómetro 41 de la autopista Duarte, están detenidos después que funcionarios de Pro-Consumidor detectaran un fraude en la venta de gas licuado de petróleo (GLP), en cuanto a peso y medida, pues por cada diez galones pagados por el cliente sólo se le echaban siete, incluida la válvula destinada para la venta a los clientes de las tarjetas Bonogás que patrocina el Gobierno a las familias de escasos recursos, según se informó. El cierre de la envasadora se produjo ayer al mediodía.
