José Virgilio Peña, el líder de La Banda Gorda, merece nuestro reconocimiento y crédito por el trabajo que ha desplegado en este año.
Mientras otros merengueros se abstuvieron de grabar nuevos discos, alegando que el país se encontraba inmerso en un proceso electoral, Peña Suazo se mantuvo en la radio con una variedad de temas musicales que le dieron vigencia. No se escindió del medio como otros hicieron.
Pasadas las elecciones, cuando se esperaba que los inactivos se reactivarían, lo que hicieron fue volver con la cantaleta a hablar de crisis, de que la radio ha cambiado, que ya no es posible lograr un éxito musical.
Y claro que no podía faltar el tratar de responsabilizar a otros de su desgracia, como siempre han hecho.
Se mantienen de una excusa a otra, y luego se quejan de que al merengue lo sacaran de catergoría en los premios Grammy por falta de producción.
Y Peña Suazo hacia adelante, como los caballos de carrera, sin mirar hacia los lados.
Lo que hizo el martes ha dejado a todo el mundo con la boca abierta. Lanzó no una sino dos producciones al mismo tiempo.
Mientras hay grupos que llevan años sin sacar un disco al mercado, Peña lanzó dos de un tiro. Todo ese despliegue y trabajo es digno de tomar en cuenta. Peña se merece crédito y nominaciones al Casandra por su gran año.
El fenómeno de las Copy Band
Ahora se ha desarrollado el fenómeno de las denominadas “copy band” que por los precios reducidos que cobran se han adueñado de muchos de los bailes en la temporada navideña.
Dizque algunos no pueden contratar a un Héctor Acosta que cobra 380 mil pesos por un baile.
Las “copy band”, como su nombre lo dice, son agrupaciones que copian el repertorio de las orquestas más populares y que suenan casi igual a las originales.
Con una ”copy band” parecería que se tiene en tarima a Los Rosario, a Fernando, El Torito, Sergio, Eddy Herrera, al mismo tiempo.
Algunos se quejan de su existencia, porque el sonido que ofrecen es de programas de computadoras que desplazan el trabajo de los músicos.
Pienso que de todo debe haber en la viña del señor. Las ”copy band” no perjudican tanto a los grupos establecidos que siempre tienen mercado y trabajo como lo están demostrando. Hay actividades donde no se le puede salir a la gente con una ”copy band”, aunque hay algunos que se atreven. Los más perjudicados de las “copy” son las bandas alternativas que quieren cobrar caro sin tener un disco pegado en la radio.
