La decadencia de la locución
La de la locución es una profesión disminuida y desvalorizada con el tiempo, por no estimar colapsada.

De aquellos emblemáticos locutores que fueron orgullo y prestigio del país en los años cincuenta, pertenecientes al staff de La Voz Dominicana ya nada queda.

De las cotizadas voces noticiosas de Radio Mil Informando, Noti Tiempo, Informativo Nacional, Noticiario Cristal, Radio Noticias, Cadena de Noticias, ya no hay nada.

Los locutores musicales que en los 80’s eran verdaderas estrellas de la animación musical, en el estilo D.J. desaparecieron, desplazados por las computadoras y los “software” de la tecnología digital.

Hoy solo quedan caricaturas de aquellos, salvo honrosas excepciones.

La misma radio musical, que hacía éxitos y pegaba temas, hoy día está reducida a la función de simple vellonera.

¿Pero saben qué es lo que más daño le ha hecho a la profesión de locutor?

El desmantelamiento de los y requisitos para trabajar en la radio, pues hoy día cualquiera puede ser animador musical, comentarista, presentador, sin ser locutor.

Y con ello llegaron los estilos destemplados, irreverentes, insolentes, sin sujeción a la dicción, ni a reglas gramaticales, donde el que más insulta o más fuerte habla es el que gana, se impone, sobresale, se destaca, no importa que transgreda todas las reglas y normas morales.

El espectro se ha cualquierizado…

Los espacios que ocupan los verdaderos locutores de otros tiempos, han sido usurpados por los invasores y depredadores del lenguaje que han impuesto los nuevos tiempos.

Fíjense que ni siquiera el Circulo de Locutores Dominicanos puede celebrar y otorgar el premio Micrófono de Oro.

¿Para premiar a quién?

¿Y cuál oro?…¿El que puso el loro?