Opinión

Artículo 124 Constitución

Artículo 124 Constitución

Una vez más se ha reformado la Constitución dominicana recurriendo a las mismas artimañas de siempre y con idénticos propósitos: Un presidente cooptando voluntades para adulterar las reglas de juego a partir de las cuales fue electo.

Lo más triste es que lo que ha ocurrido es apenas la primera etapa. A partir de ahora seremos testigos de la siguiente, el habitual y descarado espectáculo de colocar un presupuesto y una gestión de gobierno al servicio del objetivo mayor, que no es otro que la continuidad del Príncipe. Los daños colaterales de ese abuso se morigerarán después, también con fórmulas calcadas que se traducen en apretar el cinturón de la gente para superar el déficit consecuencia del bacanal y que viene a adicionarse a los de festines precedentes.

Con un proceder de tal naturaleza, no existen garantías de que en cuatro años la historia no se repetirá. Nada asegura que quien fue electo con una constitución que le prohibía ser candidato en el 2016, que juró que no le interesaba un nuevo período y que, pese a eso, modificó la Carta Magna para lograrlo, no vaya a hacer lo mismo en la próxima oportunidad.

El tema de la reelección volverá a abordarse cuando lo consideren quienes detentan el poder

En cuanto al artículo 124 constitucional, de la elección presidencial, ahora establece que el Poder Ejecutivo lo ejerce el presidente o la presidente de la República, quien será elegido o elegida cada cuatro años por voto directo. Esta vez podrá optar por un segundo período constitucional consecutivo, pero no podrá postularse jamás al mismo cargo ni a la vicepresidencia de la república.

Esa redacción ha conducido al colega Julio Cury a afirmar que el nuevo sistema de repostulación presidencial es diferente al que rige en Estados Unidos y que la palabra “podrá” en nuestro caso significa que si el presidente de turno no ejerce la opción, puede hacerlo en un nuevo y posterior proceso electoral.

No comparto esa interpretación. Es ineludible conectar la palabra “podrá” con “segundo período consecutivo”. El derecho que tiene un presidente es postularse a un único segundo y consecutivo período. De no hacer uso de esa prerrogativa, no puede intentarlo jamás porque cualquier otro proceso electoral no sería consecutivo de aquel en que fue primer mandatario.

Por ahí no vendrá el problema. No hay intención de intercalar mandatos. El tema volverá a abordarse cuando se reitere la manía de personajes políticos a quienes el alucinógeno del poder los conduce a percibirse imprescindibles.

El Nacional

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