SANTIAGO. El Arzobispado de esta ciudad abogó porque la ciudadanía tome mayor conciencia sobre la necesidad de trabajar en beneficio del sistema ecológico.
La exhortación la hace en el editorial del semanario católico Camino, órgano escrito del principal estamento de la Iglesia Católica en esta demarcación, que será publicado el próximo domingo.
Con el título de “Conciencia ecológica”, el escrito indica que lo del cambio climático no es un juego, y mucho menos una ficción. “Tampoco un tema para entretener a científicos y distraer la atención de millones de hombres y mujeres de buena voluntad a quienes les preocupan las heridas constantes que se hacen a la naturaleza”.
Y que las consecuencias de esa realidad se observan a diario en diferentes lugares del mundo. “Ante estos hechos, crece cada día el compromiso y la conciencia de aprender a convivir con la naturaleza”.
Recuerda que el papa Francisco es un abanderado de esa causa, y en su encíclica Laudato Sí traza las huellas a seguir para llegar a buen camino.
Asimismo, Camino recuerda que la Conferencia del Episcopado Dominicano (CED) “lleva años advirtiéndonos sobre los daños ecológicos que se están ocasionando en diversos puntos de la geografía nacional. Su voz de alerta ha contribuido a frenar las agresiones a nuestra casa común”.
También resalta que con motivo del Día Mundial del Medio Ambiente, y en combinación con la PUCMM, recientemente se hizo el lanzamiento oficial del documento República Dominicana: nuestra casa común.
En este texto, la CED hace un llamado a las autoridades gubernamentales y las instituciones de la sociedad civil a multiplicar los esfuerzos para proteger los recursos naturales.
Y que la Conferencia del Episcopado Dominicano externó su preocupación “por la extracción descarada de agregados de los cauces de los ríos, siendo este uno de los peores daños.
También se refirió “al robo sistemático del erario por políticos sin escrúpulos y empresarios aprovechados, que exhiben grandes fortunas adquiridas sin sacrificio alguno y de manera impune, es uno de los grandes atentados a la ecología humana”.
Por eso, el semanario Camino hace hincapié en que “la ecología humana tiene que ser lo primero; porque esta implica la necesaria relación de la vida del ser humano con la ley moral escrita en su propia naturaleza, ya que existe una ecología del hombre, porque también el hombre posee una naturaleza que él debe respetar y que no puede manipular a su antojo”.
