SAN DIEGO – “El bateador de dos strikes” no es exactamente la primera descripción que llega a la mente con Franmil Reyes.
Reyes es un jardinero derecho fuerte y corpulento con tanto poder crudo como cualquier persona en el planeta. Ciertamente no encaja en el molde de una plaga típica de dos strikes.
Y sin embargo, desde que fue llamado en agosto, Reyes ha sido exactamente eso. En la victoria 5-3 del viernes sobre los Dodgers, Reyes conectó un sencillo en la cuarta entrada para ampliar su racha de bateo a 12 juegos, la más larga para un Padre esta temporada. En ese tramo, Reyes tiene ocho hits en dos strikes, incluido un jonrón el martes por la noche.
“Él piensa que porque me tiene en dos strikes me va a ponchar”, dijo Reyes. “Me digo a mí mismo: ‘De ninguna manera. Si me ponchas, OK, me quitaré mi gorra. Pero voy a pelear contigo’. Voy a luchar con cada lanzamiento”.
Reyes tenía 66 turnos al bate con dos strikes antes de ser bajado a fines de julio. Entrando en juego el sábado por la noche, también tenía 66 turnos al bate de dos golpes desde que fue llamado. La diferencia es clara:
Antes: Promedio: .106 (370º de 397) y Slugging: .212 (315º). Después: Promedio: .303 (5° de 253) y Slugging: .500 (6°).
“Franmil está haciendo un trabajo increíble con dos strikes”, dijo el dirigente de los Padres, Andy Green. “No se ven tipos de ese tamaño capaces de entrar en su base y luchar así con dos strikes y disparar líneas fuertes por todo el campo”.
Entonces, ¿qué ha cambiado? Bueno, Reyes ha revisado por completo su enfoque con dos strikes, hasta el punto en que su postura cambia. Antes tenía una posición cerrada y erguida dandouna exagerada patada. Ahora tiene una posición más abierta, agachada y casi ninguna patada.
“Cuando se afianza en sus piernas, profundiza las manos, hace una declaración: ‘Estoy listo para moler ahora mismo, estoy listo para pelear”, dijo Green.
