SAN FRANCISCO, EE.UU, (AP).- Las autoridades migratorias de Estados Unidos estaban detrás de un joven migrante cuando la policía de San Francisco informó que éste mató a tiros a un popular activista comunitario en agosto, informaron funcionarios el viernes.
El Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE) informó que Erick García Pineda, de 18 años, estaba en libertad a la espera de ser deportado desde abril. Un juez de migración le ordenó usar un monitor electrónico en el tobillo y reportarse rutinariamente con el ICE.
No se presentó a su cita de agosto, dijo el portavoz del ICE James Schwab.
La policía informó que García usó un arma robada de un vehículo policial para matar a Abel Ezquivel, de 23 años, durante un robo el 15 de agosto. Pineda fue arrestado el 3 de septiembre por cargos menores de agresión, antes de volverse sospechoso de asesinato.
El ICE informó que la policía local desatendió una solicitud federal para no dejar en libertad a García ese día. Pero las autoridades en San Francisco, considerada “ciudad santuario”, solo hacen caso de esas órdenes cuando los sospechosos están acusados o son declarados culpables de delitos graves.
La policía arrestó a García y a otros dos sospechosos más el 11 de septiembre por cargos de homicidio.
Las llamadas “ciudades santuario” son aquellas que cooperan poco -o nada- con las autoridades federales de inmigración en cuanto a la persecución de personas que viven en Estados Unidos sin autorización.
