Opinión

Candidatura y debilidad

Candidatura y debilidad

Oquendo Medina

Qué cosa realmente ha impedido que el candidato presidencial Luis Abinader, faltando apenas un mes y varios días para finalizar el proceso electoral, no haya podido provocar en el seno de la masa votante el entusiasmo y el crecimiento por los cuales ellos, y sólo ellos, han venido apostando desde un principio?

Definitivamente que la ausencia de fortaleza y de cohesión interna del Partido Revolucionario Moderno (PRM) han sido un factor político determinante en todo lo relativo a su inocultable estancamiento.

Sólo las personas que favorecen el juego de las ilusiones podrían llegar a hacerse la idea de que realmente el nuevo PRM, con su nuevo líder y su nuevo candidato, reúne las condiciones suficientes para desplazar del poder a la maquinaria política electoral más formidable, poderosa e inteligente que conoce la sociedad dominicana.

En realidad, nunca jamás, una candidatura presidencial, la cual manifiesta a todas luces debilidades políticas, adoleciendo de liderazgo emprendedor y de conocimiento profundo de la cosa pública, acostumbrada a declaraciones tremendistas sin asideros de legalidad, podrá de la noche a la mañana conquistar el corazón de la mayoría de los votantes.

Y esa situación que evidentemente contrasta con la candidatura compacta y triunfal del presidente candidato Danilo Medina, quien se presenta con un alto porcentaje de popularidad como hombre de Estado y de comportamiento transparente, pone en jaque mate tanto a Abinader como a sus estrategas de campaña.

Conforme a la verdad, todo razonamiento justo tiende a conducir al buen observador a la conclusión lógica de que la debilidad de Luis Abinader es proporcionalmente opuesta a la fortaleza de Danilo Medina.

En efecto, si algo no está en discusión en nuestro país es la certeza de que la candidatura morada está prácticamente dominando a todo lo ancho y largo de nuestro territorio el escenario político electoral.

Por lo tanto, revertir el proceso actual que favorece al presidente Danilo Medina resulta imposible, políticamente hablando. Ello así producto de la alta y cómoda valoración positiva que dentro del mercado electoral hoy día posee el candidato del Partido de la Liberación Dominicana (PLD).

El Nacional

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