MILWAUKEE.- En una temporada de pérdidas devastadoras, los Cerveceros se aferraban el jueves a la esperanza de que habían esquivado otra. Este viernes por la mañana un examen de resonancia magnética de la rodilla derecha de Carlos Gómez revelará si tenían razón o no.

Gómez, el sensacional jardinero central con la oportunidad de convertirse en el primer ganador del Premio Guante de Oro de los Cerveceros desde que Robin Yount ganó en el campo corto en 1982, salió del partido que perdieron 2-1 ante los Rojos después de torcerse la rodilla derecha haciendo una atrapada chocando con la pared en la cuarta entrada. Él estaba en muletas después del partido y en serio dolor, pero las primeras palabras del personal médico del club ofrecieron aliento.

“Me siento muy hinchado y adolorido en este momento, pero el médico tomó un vistazo y dijo que no es tan malo como me siento”, dijo Gómez. “No creo que sea algo realmente grave. Ahora, todo ha comenzado a hincharse y es muy doloroso en este momento y vamos a saber mañana si hay algún daño”.

Gómez se lastimó cuando hizo una atrapada espectacular para el primer out de la cuarta entrada para robar un hit a Brandon Phillips, de los Rojos. La parte baja de la espalda de Gómez conectó con la pared cuando caía, y se quedó en el suelo por un momento mientras el jefe entrenador atlético de los Cerveceros, Dan Wright comenzó a trotar hacia el jardín.

Después de brevemente tratar de correr, Gómez salió del juego y se dirigió a la sala de entrenamiento. Cuando los jugadores del cuadro Mat Gamel y Alex González sufrieron desgarramientos de ligamentos de rodilla en la misma gira en mayo pasado, los entrenadores físicos de los Cerveceros realizaron pruebas manuales y supieron casi de inmediato con lo que estaban tratando. El jefe médico William Raasch realizó la misma prueba el jueves con resultados más prometedores, según el manager Ron Roenicke.