San Luis clama atención
Señor director:
Los munícipes de este Distrito Municipal (el más poblado del país con cerca de 70 mil habitante) hemos recibido con beneplácito la inauguración de la Escuela Básica Isabel Segura de Apataño, el miércoles 4 de febrero del año en curso, con lo que sumamos 22 aulas que albergarán a 805 estudiantes, ubicadas en los terrenos del antiguo Ingenio Ozama, patrimonio de la comunidad.
Con esta inauguración seguimos avanzando a pasos agigantados en el ámbito educativo; sin embargo la comunidad necesita la intervención del gobierno para mejorar algunos aspectos que nos mantienen en situación de extrema pobreza y desesperanza, entre las que podemos citar:
1) Drenaje y limpieza de la laguna de la Balza que cuando llueve inunda más de 400 casas (a menos de 20 metros del ITSC-San Luis).
2) Arreglos y asfaltados de calles y caminos vecinales.
3) Inclusión de más de 5 mil hogares en los programas de subsidios sociales.
4) Construcción y habilitación de instalaciones deportivas.
5) Mejoras en el suministro de energía eléctrica y cambio del horario establecido (a diarios asaltan decenas de hombres y mujeres que se dirigen a sus respectivos trabajos pues amanecemos a oscura).
6) Limpieza y drenaje de cañadas que atraviesan la comunidad.
La manifestación que el presidente encontró a su ingreso y retiro de la comunidad es solo un reflejo que le debe indicar que todo no es color de rosa, que realice una visita sorpresa por la comunidad y contacte la situación de los sectores, La Colonial, La Balsa, Piragua, Corte Bolo, la Gallera, La Emplanada, el Quilombo, Bella Vista, Las Casitas, etc.
Prometieron que con la apertura del ITSC, incluirían el arreglo de las calles y la mejora de la calidad de vida de los munícipes, pero no han cumplido con sus promesas.
Esperamos una rápida intervención que ayude a mejorar la situación de nuestra comunidad.
Atentamente,
Pascual Leocadio
Piden eliminar laguna
Señor director:
Desde hace varios meses una putrefacta laguna de aguas verdes adorna la esquina de la avenida Padre Castellanos con calle Ocho.
De nada han valido los reclamos de los residentes en los alrededores del ensanche Espaillat y 27 de Febrero.
Ojalá que algún funcionario se anime a ponerle fin a este foco de contaminación en plena ciudad.
Atentamente,
Fermina Fragoso
