Aumenta la indigencia
Señor director:

La economía dominicana creció 6.9 por ciento en el período septiembre del 2016 a enero del 2017, según cifras dadas a conocer por el Banco Central.
Ese crecimiento es una continuación del comportamiento de la economía dominicana en los últimos 14 años desde que el Partido de la Liberación Dominicana (PLD) asumió el control político en el país.

Sin embargo, ese crecimiento no se refleja en la calidad de vida de los dominicanos, que cada vez pagan los alimentos, el transporte y otros servicios a un precio mayor.
A pesar de lo que pregonan los funcionarios del Estado, cada día es mayor el número de desempleados, de chiriperos, de buhoneros, y de gente que se gana la vida en las calles, vendiendo cualquier cosa, o realizando cualquier labor que le reporte un dinerito para sobrevivir.

Mientras el crecimiento de la economía se refleja en los periódicos, el aumento de la pobreza se refleja en las calles, especialmente en los alrededores de los centros comerciales.

Basta caminar por lo alrededores de la avenida Duarte con París para percatarse de la gran cantidad de gente que duerme en las aceras, en los zaguanes, debajo de las escaleras, y en las aceras de tiendas y otros establecimientos. Es enorme.
Igualmente ocurre en otras zonas como Villa Juana, Villa Consuelo, en el Expreso Quinto Centenario, y en los alrededores de la avenida Nicolás de Ovando con avenida Máximo Gómez.

Uno de los elementos más llamativos es la gran cantidad de adultos mayores, muchos incapacitados, que no solo duermen en las calles, sino que se alimentan día tras día de los desperdicios que otros arrojan en los vertederos y basureros.

Estos marginados se apresuran todas las mañanas a recorrer la mayor cantidad de basurero, para adelantarse a otros indigentes y para recoger la mayor cantidad de cosas, y antes de que el camión recolector pase.

Resulta penoso y desgarrador ver a gente de 60, 70 y 80 años, recogiendo alimentos en descomposición, los que en muchos casos constituye la única comida del día de esas personas. .

Quiera el Señor, Todopoderoso, que esa situación pueda ser revertida con una mínima proporción del crecimiento económico que se alega registra el país.
Atentamente,

Arturo Pérez Novas