TAMPA, Florida – Si los Yankees necesitan a Starlin Castro para llenar el hueco en el campo corto por el tiempo que Didi Gregorius esté marginado por su lesión en el hombro derecho, el segundo base confía en que puede manejar la tarea.
“Puedo hacer eso con seguridad. Esa es mi posición natural y creo que puedo hacerlo”, dijo Castro el lunes después recibir turnos al bate en un partido de Clase-A contra los Azulejos en el complejo de ligas menores de los Yankees. “Si me preguntan, voy a decir que sí. Esperemos que (Gregorius) esté bien”.
Gregorius, que estuvo con el equipo de Países Bajos en el Clásico Mundial de Béisbol, será examinado el martes en Tampa luego de ser diagnosticado con un hematoma del músculo sub-escapular.
Ya sea que Gregorius pierda una semana o meses de la temporada regular, Castro fácilmente tiene la mayor experiencia en el campo corto que cualquiera en el sistema de los Yankees.
De los 1,042 partidos de liga mayor de Castro, 844 son como un campo corto. Después de ser adquirido de los Cachorros antes de la temporada pasada, Castro jugó 146 partidos en segunda base para los Yankees. Él jugó 107 juegos en el campo corto en 2015 para los Cachorros y 133 juegos la estación anterior en la posición.
