LA HABANA. AFP. El estelar Frederich Cepeda, el bateador cubano más temible en la historia del Clásico Mundial, abogó el miércoles por la inclusión en el equipo nacional de los beisbolistas exiliados que brillan en las Grandes Ligas.
“Si todos esos peloteros (que abandonaron la isla y están jugando en el extranjero) tuvieran la oportunidad de jugar por Cuba, tendríamos una de las ligas más fuertes en América Latina”, dijo Cepeda, de 36 años.
La estrella habló con la prensa en el Estadio Latinoamericano de La Habana, tras una sesión de entrenamiento de la novena que va al IV Clásico (marzo).
Líder en varios departamentos ofensivos en el Clásico, Cepeda consideró que el éxodo “tan grande” de beisbolistas ha afectado el rendimiento de la selección.
“Estoy de acuerdo que ellos (los que abandonaron la isla) puedan jugar en la selección cubana. Y que los que estén aquí puedan jugar allá”, sostuvo.
“Se han formado aquí en Cuba y pienso que algún día puedan jugar acá”, agregó Cepeda, una de las pocas figuras que asistirá a su cuarto Clásico Mundial en marzo.
Cuba mantiene las puertas cerradas a los beisbolistas emigrados. El presidente del Instituto Cubano de Deportes, Antonio Becali, dijo en 2016 que al IV Clásico irían únicamente con los peloteros que juegan en la isla.
El tema está en la mesa de negociaciones que mantienen Cuba y las Grandes Ligas reveló en rueda de prensa el presidente de la Federación Cubana, Higinio Vélez, sin dar detalles.
Cuba es el único país al que se le impide transferir a sus beisbolistas a las Grandes Ligas, debido a las leyes del embargo que tiene Washington contra la isla desde hace más de cinco décadas.
EL DATO
Algunos de los
astros cubanos que dejaron la isla, entre ellos los Grandes Ligas José Abreu, Yoenis Céspedes y Aroldis Chapman, han manifestado sus deseos
de defender los colores del equipo de Cuba.
