El alcalde del Distrito Nacional, David Collado, se anota un valioso tanto, que apuntala más su gestión con el convenio suscrito con el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) para supervisar las compras de la entidad edilicia.

Las compras y contrataciones constituyen una de las vías más expeditas para el cáncer de la corrupción que ha hecho tanto daño a la nación y que hoy tanto irrita a la población.

El acuerdo suscrito entre Collado y el representante del PNUD, Lorenzo Jiménez de Luis, fortalece la estructura institucional en la medida que las operaciones tendrán que efectuarse con el más estricto apego a la Ley de Compras y Contrataciones Públicas.

Los alrededor de 200 millones de pesos al año que eroga el cabildo en transacciones comerciales no son jícara de coco.

Los ayuntamientos, que tanto gritan por la falta de recursos, deben imitar decisiones que contribuyan por lo menos con la transparencia para mejorar siquiera en algo su imagen.