Por falta de abogados será ventilada hoy a las 5:00 de la tarde la medida de coerción por intentar matar a Yubel Henríquez Méndez Méndez (Oreganito).
Ninguno de los acusados tenía abogados, por lo que el juez Honorio Antonio Suzaña, tuvo que aplazar la audiencia.
El aplazamiento fue planteado por la fiscal adjunta Fátima Sánchez y advirtió que si hoy no se presentaban los abogados se le asigne un defensor público.
Los acusados son Clara Guillermina Márquez Hernández, Fernando Manzueta Manzueta, el taxista Carlos Jesús Van Eiker Matos y Alejandro Antigua Mueses.
Oreganito explicó a las autoridades que cuando fue extraditado hacia Estados Unidos, otorgó un poder de representación a su entonces esposa Márquez Hernández, a su regreso al país tenían problemas por los bienes.
Con Oreganito en prisión en Estados Unidos, Márquez Hernández, inició una relación de pareja con el abogado Mazueta Manzueta, quien la convenció para adjudicarse los bienes, matándolo.
Intentos fallidos
Por lo menos en dos ocasiones anteriores fracasaron en el intento de quitarle la vida a Oreganito por la falta de coordinación.
El argumento siempre fue el interés en la compra de invernaderos que Oreganito tenía en venta.
Para ellos, según la Fiscalía, Manzueta contactó a Hilorka González Franco, para conseguir a los matadores, esta mujer se convierte en la principal testigo del Ministerio Público.
El primer intento fallido fue cuando Fernando Manzueta, contactó a dos hombres conocidos como Josesito (Bio) y Bismark, a quienes pagó 100 mil pesos, y éstos nunca cumplieron la misión y desaparecieron con el dinero.
Ante la ausencia de Bio y Bismark, Fernado decidió contactar a Van Eiker Matos y quien a su vez buscó a Narciso Florentino (Dominguito), prófugo, para ejecutar el plan.
Precisa el expediente que Van Eiker Matos inició una vigilancia en la residencia de Oreganito para conocer sus movimientos y rutina
Ya en Plaza Lama, día 7 de mayo, Oreganito se tomó un café, habló con Antigua sobre la venta de los invernaderos, pero cuando se desplazó para irse en su vehículo ahí lo encañonaron e intentaron montarlo en una yipeta donde había dos hombres abordo, para secuestrarlo, precisa el expediente.
Sus raptores Manzueta, Antigua y Van Eirker, se identifican como miembros de la DNCD, se inició un forcejeo y gritó que se trataba de un atraco.
