DAJABON. Si no hay Haití tampoco Dajabón. Sin el comercio con los haitianos este sería un pueblo fantasma. Es la percepción que tienen muchos empresarios y comerciantes de esta ciudad cuyos negocios en más de un 90% dependen de la presencia haitiana no solo para la compra y venta de productos agrícolas o terminados, sino para realizar labores que muchos dominicanos consideran odiosas.
El mercado binacional de Dajabón es el más grande de los 14 que operan en la frontera a los que acuden 180 mil compradores y vendedores de todo el país cada lunes y viernes.
La pujanza económica de esta comunidad se mide a través de sus 32 hoteles, un comercio activo y la presencia de cientos de turistas casi a diario, mucho más que en Santiago o que cualquiera de las otras grandes ciudades de la República Dominicana, afirma Carmen Rodríguez, presidenta de la Asociación de Hoteles y del cluster turístico de Dajabón.
Mientras el presidente de la Cámara de Comercio, David Sosa, afirma que hay que cuidar el mercado binacional porque es determinante para el desarrollo y crecimiento económico de la región
“Aquí nadie se puede llamar a engaño, cuando hay problemas en el mercado binacional no hay dinero para nadie, ese mercado activa todos los ámbitos de la economía dajabonera.
Por ejemplo un día antes de que se abra el mercado binacional todos los hoteles están atestados de personas que vienen a comprar y a vender, mira hoy aquí yo tengo el hotel tan lleno, que una habitación que tenemos para nosotros tuvimos que cedérsela también a unos visitantes”, sostuvo.
Añadió que “nosotros vendemos a los turistas que pueden disfrutar de dos culturas en un solo pueblo y eso para nosotros es fabuloso”.
Para la dirigente de los hoteleros de esta ciudad fronteriza normalmente el haitiano lo que hace es que viene al país vende mercancías y con el dinero se suple de productos dominicanos.
Destacó que las relaciones comerciales con Haití movilizan a comerciantes y empresarios de todo el país que visitan la zona para hacer negocios.
Diálogo binacional
Informó que para fortalecer y viabilizar las relaciones comerciales con Haití son parte de la Mesa del Diálogo Binacional.
Rodríguez resaltó igualmente que trabajan con varias organizaciones de mujeres rurales y jóvenes. Citó la Asociación de Mujeres Defensoras de las Montañas, asociaciones de artesanos, artistas plásticos, escuela para sordomudos y otras.
Afirmó que desde el cluster turístico también imparten talleres de cortes y confecciones, tapicería y otros.
Pidió a las autoridades coordinar con el Gobierno haitiano para que el mercado binacional de Dajabón opere todos los días.
Destacó que el trabajo agrícola y de la construcción son rechazados por los dominicanos, así como el de cocinar o lavar, pero estas labores los haitianos las hacen con eficiencia.
Cámara de Comercio
Mientras que David Sosa, de la Cámara de Comercio, dice que con la presencia de los haitianos que visitan a Dajabón los que se benefician son los habitantes de la región.
“Y te explico algo, el haitiano que viene a Dajabón normalmente no se queda por la cercanía con su país, la mayoría procede de Juana Méndez y zonas aledañas y eso está ahí mismo.
Propuso a las autoridades regularizar la presencia de los haitianos que vienen al mercado binacional “porque muchos vienen con miedo a que lo suban en un camión y lo devuelvan, con lo que perderían sus mercancías”.
Lamentó que muchos empresarios y comerciantes haitianos que visitan a Dajabón para realizar transaciones comerciales en ocasiones se desplazan asustados como si tuvieran haciendo algo malo “y todo por la falta de reglas claras en las relaciones domínico-haitiana.
Los millones
El de Dajabón es sólo uno de los 14 mercados que funcionan a los de los 382 kilómetros que tiene la franja fronteriza entre República Dominicana y Haití.
Se sabe que en la frontera operan los lunes y viernes los mercados de Restauración, Dajabón; Comendador, Tirolí, Bánica, Los Cacaos, Guayajayuco, Cañada San Miguel, Hato Viejo, y El Cacique, en la provincia de Elías Piña.
