Opinión

Comercio y Haití

Comercio y Haití

Las relaciones comerciales entre Haití y la República Dominicana, han tenido una serie de tropiezos que imposibilitan la estabilidad de las mismas, toda vez que los vecinos adoptan decisiones unilaterales y cierren los mercados bilaterales que se desarrollan en algunos puntos fronterizos cada semana.

Hay un gran debate sobre los beneficios que aportarían los haitianos al país, en relación con las exportaciones de los productos nacionales hacia Haití, ya que el sector agropecuario prefiere los mercados europeos, despreciando incluso negociar con los compradores estadounidenses, actitud que muchos consideran errónea.

El economista dominicano José Café, radicado en Barcelona, España, nos escribe sobre el tema y hace el siguiente enfoque:

“La única causa en torno al cual los dominicanos se unen es la haitiana y no en todos sus componentes. La intención de que sea RD la que se haga cargo de Haití es real. Sin embargo, ellos pagan por los servicios médicos y otros que ustedes les ofrecen. Les están sacando más de mil millones de dólares netos anuales en comercio exterior. Lo peor es que si siguen descuidando esa gallinita, la pueden perder. Las exportaciones hacia ese país están bajando a un ritmo de 200 millones de dólares por año.

Decir que nos quieren invadir es exagerado. Colombia, Perú, Chile, Brasil y hasta la misma RD podrían decir lo mismo de los venezolanos. Ellos solo están huyendo de las respectivas crisis económicas de sus países. RD, sin estar en crisis ni ser un Estado fallido, tiene más de dos millones de habitantes viviendo fuera.

Si los dominicanos tienen tanta vocación aditiva ¿Por qué no se ponen de acuerdo para construir un muro en la frontera?.

 

Por otra parte, para las ciencias políticas, ni Balaguer ni Trujillo fueron dictadores. La dictadura es una forma de gobierno de una minoría sobre la mayoría. Y tanto el Partido Reformista como el Partido Dominicano estaban muy lejos de ser organizaciones minoritarias durante los respectivos gobiernos de esos dos líderes. A ese tipo de régimen se le llama gobierno de fuerza”.

El Nacional

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