La comisión de asambleístas que estudia el tema relativo al congelamiento de la matrícula de la Cámara de Diputados no ha podido reunirse en seis oportunidades para rendir su informe, porque la mayoría se opone a esa decisión acordada entre el presidente Leonel Fernández y el ingeniero Miguel Vargas Maldonado.
Los asambleístas no quieren que de los 178 diputados se distribuyan 20 entre nacionales y representantes de comunidades dominicanas en el exterior.
El titular de esa comisión, doctor Teodoro Ursino Reyes, ha convocado en múltiples ocasiones a los asambleístas para discutir el tema, pero no se ha llegado a ningún acuerdo.
Los asambleístas argumentan que no cederán el espacio que se han ganado para otorgarlos a otros.
Hay un grupo que propugna por que le agreguen 20 diputados a los actuales, es decir, llevar la matrícula de la Cámara Baja de 178 a 198.
Otros sugieren que se incrementa en 12 para que los diputados sean 190 y algunos aspiran a que se desestime el acuerdo entre Fernández y Vargas Maldonado y se quede todo como está.
Sin embargo, el asambleísta del PRD Rafael Vásquez Paulino, uno de los abanderados del derecho de los dominicanos del exterior a tener representación en el Congreso, declaró que no se puede pensar en sus compatriotas sólo cuando se requiere dinero para financiar las campañas electorales.
El proyecto de reforma constitucional de Fernández sugiere el aumento de 178 a 250 los miembros de la Cámara de Diputados, después lo enmendó mediante un acuerdo con Vargas Maldonado.
Otro de los puntos acordados entre Fernández y Vargas Maldonado fue la prohibición de la reelección presidencial y la elección por seis años de manera provisional a los legisladores que salgan electos en las elecciones del 2010 para unificar los comicios en las elecciones a celebrarse el año 2016.
