Un hombre acusado de violar una niña de 11 años, sobrina de su esposa, fue condenado ayer a cumplir una pena de 20 años de prisión.
Las juezas Gisselle Méndez, Indrid Fernández y Claribel Nivar Árias declararon culpable de incesto a Joel Galván Valdez y lo enviaron a cumplir la pena a la cárcel de La Victoria.
Según la acusación Galván Valdez aprovechaba que su esposa no estuviera en la casa para violar la niña y la amenazaba de muerte para que no hablara.
El 21 de marzo de este año, la niña manifestó a la orientadora educativa del Centro Parroquial Domingo Sabio, del barrio 27 de Febrero donde estudiaba, que había sido agredida sexualmente y amenazada en varias ocasiones por el esposo de su tía.
La violación causó graves daños emocionales a la víctima, como cambios en su comportamiento y presenta sintomatología relacionada con ansiedad y depresión, los cuales se manifiestan con estado de irritación y dificultades para relajarse, entre otros problemas.
El tribunal acogió el pedimento del Ministerio Público, representado por la fiscal María Cristina Benítez, que solicitó al tribunal una condena de 20 años.