TEGUCIGALPA. AP.- El derrocado presidente hondureño Manuel Zelaya calificó de represalia equivocada y de acusación falsa la petición que la fiscalía hizo a los tribunales para que ordenen arrestarlo a él y a cuatro de sus colaboradores por corrupción.
Continúan en sus cargos los coautores del golpe de Estado (como) el fiscal general (Luis Rubí), los magistrados de la Corte Suprema y la misma cúpula militar (que), manipulando las leyes y la justicia, solicitan orden de captura en contra de mis actuaciones, añadió.
Esos actos son represalias equivocadas como respuesta a las posiciones de los estados latinoamericanos en la cumbre (de México), que no dio participación al gobierno de (Porfirio) Lobo, dijo Zelaya en un comunicado enviado el jueves a la AP desde la República Dominicana, donde se refugió el 27 de enero.
Acusó a Lobo de tomar venganza personal y recrudecer la persecución política en mi contra, olvidándose de la reconciliación nacional que él se comprometió a ejecutar ante la comunidad internacional para unir la familia hondureña tras la crisis política surgida en Honduras.
Zelaya (2006-2009) subrayó que en el exilio y ante las injurias, calumnias y acusaciones falsas y tendenciosas, hoy los mismos autores del golpe presentan en mi contra acciones de clara persecución política, e instó a Latinoamérica a continuar vigilante y respaldar a los hondureños en su lucha por restaurar la democracia.
Lobo no se pronuncia aún sobre el tema. Sus voceros aseguraron a la AP que posteriormente habría una posición oficial. La reacción del presidente defenestrado se produjo luego que la fiscalía lo encausó el miércoles por tres nuevos delitos, junto a cuatro de los que fueron sus funcionarios.