La música clásica y la literatura están de luto tras el fallecimiento del destacado músico, ensayista y escritor, Jacinto Gimbernard Pellerano.
El laureado concertista de violín y políglota, quien murió anoche a la edad de 85 años, en su residencia, será cremado y posteriormente se le realizará una misa, cuyo día, lugar y hora aún se desconocen.
La reconocida figura de la música y las letras era padre de seis hijos, Bienvenido (fallecido); Gracielina y Jacintico Gimbernard; Miriam, Raquel y Juan José. Estuvo casado con la pianista Miriam Ariza, hasta su fallecimiento en el 2014.
Amigos, allegados y seguidores han expresado por diferentes vías su gran pesar por la muerte del reconocido y admirado escritor.
Pilar Albiac, administradora de la Fundación Corripio, manifestó que Jacinto Gimbernard fue “una persona noble, leal y humana, y los que estuvimos cerca de él podemos destacar que era un excelente ser humano, con grandes dotes como músico”.
Gimbernard, quien era director ejecutivo de la Fundación Corripio y articulista semanal del matutino Hoy, nació el 17 de septiembre de 1931, en Santo Domingo.
Hijo del destacado periodista y caricaturista Bienvenido Gimbernard y de la señora Concepción Pellerano, fue un virtuoso de la música.
Inició su formación musical a los seis años con el profesor alemán Willy Kleimberg y los continuó con el italiano Danilo Belardinelli y el dominicano Ernesto Leroux.
Gimbernard fue un niño prodigio, ingresó a la Orquesta Sinfónica Nacional como violinista cuando tenía tan solo 13 años de edad.
Avanzó con el pasar del tiempo a los primeros violines, y luego se desempeñó como concertino por más de treinta años.
El maestro fue director de la Orquesta Sinfónica Nacional (OSN) y del Teatro Nacional Eduardo Brito. Impulsó el desarrollo de la Orquesta Sinfónica y fue el primer director que viajó al exterior a contratar ejecutantes musicales.
Su arte lo llevó por Europa, Estados Unidos y América Latina. Fue embajador en Francia, ocasión en la que presentó un concierto interpretando el violín y su esposa Miriam Ariza el piano, instrumento del que era una virtuosa.
En cuanto a su carrera como escritor, Gimbernard Pellerano publicó en 1966 Historia de Santo Domingo, libro que fue usado en las aulas por muchos años.
Entre las obras históricas, musicales y literarias de Gimbernad figuran además “Medalaganario”, “Rutas de la cultura universal”, “La identidad del hombre”, “Treinta relatos sinfónicos”, “Trujillo, estudio histórico”, “Siete historias de divorcio”, “Los Grau”, “Educación musical”, “Narraciones de vuelta al mundo” y “Acción y presencia del mal”.
