Opinión

Crónica del Presente

Crónica del Presente

Misión cumplida

El jueves 29 del mes pasado el presidente de la República dejó inaugurado, formalmente, el funcionamiento de la obra moderna más importante que se ha construido en nuestro país en los últimos años. El transporte metropolitano conocido con el nombre popular de “el Metro”, nombre con el que se conoce también en la mayoría de los países en donde existe, es en términos sociales una demostración incuestionable, éxito imbatible, del gobierno del Partido de la Liberación Dominicana que encabeza el doctor Leonel Fernández Reyna, que ha sido en el orden personal el autor de la idea que se puso en práctica inmediatamente después de la toma de posesión como presidente electo en agosto del año 2004. “Honrar honra”, decía José Martí, el apóstol de la independencia de Cuba. Y al reconocerle a Leonel Fernández el éxito de esa obra extraordinaria, estamos expresando a través de esta columna el sentimiento y el pensamiento de la inmensa mayoría de nuestro pueblo.

La construccion de esta obra según entendidos en la materia, se ha realizado en tiempo record. Señalando, al mismo tiempo, la calidad de la misma y las características modernas que no tienen nada que envidiar a los medios de transporte similares a los de  países desarrollados. ¡Bien por el gobierno del PLD! No importa lo que digan “los líderes del fracaso”, que desde la desaparición física de Trujillo, la mayoría de ellos, verdaderas veletas políticas, no han hecho más que denunciar, criticar, abjurar y señalar todas las cosas positivas que desde el Poder Ejecutivo se han realizado para el beneficio del pueblo.

El autor de esta columna, presente en el Consejo de Gobierno en el cual el presidente de la República anunció la construccion del Metro, fue parte de un grupo que no recibió con satisfacción y convencimiento la disposición del compañero Leonel Fernández, de llevar a cabo la construccion del Metro en la ciudad capital, pero en la medida en que se fue dando a conocer el proyecto y luego de varias intervenciones de Diandino Peña como responsable de la ejecución de la misma, quedamos convencidos, no solamente de la importancia inmediata y futura sino también la actitud cada vez más agresiva, insolente, atrevida e irrespetuosa, de los sindicatos de transporte urbano, que en realidad no son sindicatos de nada, sino organizaciones empresariales del transporte con reiterado comportamiento delictivo.

Aproximadamente 15 mil automóviles y pequeños autobuses, destartalados, conducidos por “padres de familias”, autocalificativo convertido en “Patente de Corso” , consumiendo gasolina, aceite, gas,  neumáticos, que no se producen ni se fabrican en nuestro país, sin documentos como matriculas, revistas, Seguro, la mayoría de ellos sin licencia de conducir, sin luces, largando humo y destruyendo el ambiente, que agrava con serias enfermedades la salud de la población. Comprendimos que una comunidad integrada por más de 2 millones de habitantes no podía continuar bajo el chantaje, el desafío y la agresión de una minoría insensible, mal educada e irrespetuosa. ¡Bien por el gobierno del PLD! Y saludos de felicitación a Leonel Fernández!

Nos vamos de  inmediato a la construccion de la segunda línea que irá de Los Alcarrizos a San Luis, y al mismo tiempo sin temor, sin vacilaciones, con  firmeza, extenderemos la vía del tren  que irá de Haina a Santiago y que debe extenderse después en diferentes ramales que cubran la Línea Noroeste, el Norte y el Nordeste. Más luego  la línea que irá de Haina a Barahona y hasta el Sur profundo, que será la última etapa de la modernización de este pequeño país “tocado por la mano de Dios”, que es dueño de riqueza inigualable por la fertilidad de sus tierras y la cantidad de fuentes fluviales que todavía, tenemos por las que estamos obligados a aplicar con seriedad y alta tecnología, un plan que nos permita reorganizar e incentivar el aparato productivo. Misión que es obligatoria para todos los dominicanos en capacidad de trabajar y no para los hermanos vecinos del pueblo haitiano, que en circunstancias dolorosas de la historia se hicieron dependientes del pueblo dominicano.

Que denuncien, que calumnien, que mientan, “los líderes del fracaso”, veletas del momento, sin iniciativas y carentes del sentido común que no es el más común de los sentidos. En el campo de batalla estamos; y estamos obligados a recordar, segundo a segundo, minuto a minuto, hora a hora y día a día, que en política “la pelea es peleando”. Que permitir, por irresponsabilidad o temor, que “la caballería de Atila” vuelva  a dirigir el país, nos presentará frente al mundo con perfiles de irresponsabilidad y cobardía, que pusimos en manos incapaces, ajenas al orden, la prudencia y el respeto, el destino de la República que nació a la vida internacional el 27 de febrero de 1844.

El Nacional

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