BOSTON. Los Medias Rojas de Boston establecieron un nuevo estándar de despedidas en Grandes Ligas con la ceremonia del domingo en honor al jonronero dominicano David Ortiz, quien se retirará del béisbol luego de la temporada.
En su última serie de la temporada regular, contra los Azulejos de Toronto, los Medias Rojas realizaron un acto antes del partido por tercer día consecutivo. El del domingo fue un evento majestuoso, acorde con la estatura y la figura del popular “Big Papi” en Boston.
Las autoridades de la ciudad y el estado de Massachusetts anunciaron el nombramiento de un puente y una calle en honor al jugador, los Medias Rojas informaron que su #34 será retirado durante un acto en la temporada del 2017 y el aporte un millón de dólares ($500 mil de parte de la directiva y $500 mil de parte de la Fundación de los Medias Rojas) a la Fundación David Ortiz, que recauda dinero para operar niños con problemas cardíacos en Estados Unidos y República Dominicana.
Los propietarios de los Medias Rojas John Henry y Tom Werner estuvieron al lado de Ortiz cuando se hicieron los anuncios.
El gobernador de Massachusetts, Charlie Baker, a nombre de la gobernación y el senado estatal, informó del plan para renombrar el puente de la avenida Brookline como “David Ortiz (´Big Papi´) Bridge”.
Por su lado, el alcalde de Boston, Martin J. Walsh, detalló que la extensión de Yawkey Way que corre entre la avenida Brookline y la estación del tren se llamará “David Ortiz Drive”.
El director médico de la organización, Dan Dyrek, entregó a Ortiz un bate de oro de 24 kilates para reconocer sus aportes al club por los últimos 14 años. Desde la llegada de Ortiz, en el 2003, el bateador designado conectó 483 de los 541 jonrones que tiene en su carrera de 20 años y ayudó a los Medias Rojas a conseguir sus únicos tres campeonatos en casi un siglo y avanzar ocho veces a la postemporada.
“Al mejor bateador de momentos grandes en la historia. Por 116 temporadas, cerca de dos mil jugadores vistieron el uniforme de los Medias Rojas.
Tu estás en un lugar único. Tu cargaste un equipo sobre tu espalda y una ciudad en tu corazón. Gracias por lo imposible. Por los abrazos, las risas y por ser el centro de una era dorada de esta franquicia”, dice una inscripción en el bate.
El domingo, cada aficionado recibió una bandera de República Dominicana en la entrada del Fenway Park y una bandera gigante de la nación caribeña cubrió el Monstruo Verde del jardín izquierdo cuando el jovencito León Yamil Suberví Ramos interpretó el Himno dominicano.
El presidente quisqueyano, Danilo Medina, hizo el lanzamiento ceremonial de la primera bola y el comisionado de Grandes Ligas, Rob Manfred, anunció la creación del “Programa de Becas Ortiz”, que será administrado por los Medias Rojas y MLB, y que cada año escogerá un estudiante graduado para trabajar por un año en la oficina de Boston y participar en proyectos del gobierno de las ligas mayores.
En un comunicado del gobierno, se informó que Medina estuvo en Boston en un viaje estrictamente privado para representar el agradecimiento de todos los dominicanos a Ortiz, una gloria del deporte nacional y mundial”.
“David es un ejemplo para la juventud dominicana, demostrando que cuando se quieren hacer las cosas bien y se le pone empeño, todo es posible”, dijo el presidente Medina.
“David es uno de esos jugadores que definirán una generación de jugadores. El transformó la historia de los Medias Rojas”, dijo Manfred durante una conferencia de prensa previa al acto.
Para tan magna ocasión, en el Fenway Park también estuvieron algunos grandes Medias Rojas de todos los tiempos, como los jardineros del Salón de la Fama Carl Yastrzemski y Jim Rice, y varios integrantes de los equipos de Boston que ganaron la Serie Mundial en 2004, 2007 y 2013, incluyendo los dominicanos Pedro Martínez y Manny Ramírez, los puertorriqueños Mike Lowell y Alex Cora y el venezolano Francis Mojica, entre muchos otros.
Martínez, quien entró a Cooperstown el año pasado, fue quien recomendó a Boston firmar a Ortiz.
UN APUNTE
Lágrimas
“Agradezco a mi padre por enseñarme a ser un hombre correcto, a mi madre….”, dijo Ortiz con voz quebrada antes
de tener que parar de hablar para enjugar sus lágrimas.
Luego de agradecer a la organización de los Medias Rojas, a las ligas mayores, a sus agentes, y a Pedro Martínez.
