El gobernador del Faro a Colón denunció que recibió ese monumento en deplorables condiciones como la falta de agua potable, iluminación y con miembros de la Marina implicados en robos de piezas históricas.
El Faro ha sido abandonado por los gobiernos anteriores al actual del presidente Medina, convirtiéndolo, al igual que otro instrumento de extraordinaria importancia para el pueblo dominicano como lo es la reforma agraria, en un huacal para premiar comportamientos partidistas satisfactorios, deploró el escritor y sociólogo Mario Bonetti, quien tomó el control del monumento el 15 de febrero.
Explicó que el segundo y tercer nivel del edificio no operan desde hace una década simplemente porque las bombillas de iluminación están dañadas.
A todo buen dominicano le debería provocar tristeza que importantes exhibiciones de las segundas y tercera plantas estén cerradas al público por oscuridad, simplemente porque las bombillas se quemaron y desde hace más de diez años no se han podido comprar, opinó en declaraciones por escrito.
El Ministerio de Cultura, entidad que rige ese museo, explica en su página web que el Faro a Colón es un monumento que alberga los restos mortales del descubridor de América, almirante Cristóbal Colón. Esta entidad investiga, expone, conserva y difunde la memoria histórica y el patrimonio internacional relacionado con el descubrimiento, colonización y evangelización de América, en las tres vertientes involucradas, Europa-Asia, África y América.
El gobernador del Faro dijo que entre las exposiciones cerradas por falta de iluminación se encuentran una titulada “África en América”, otra de la moda femenina durante el gobierno de María de Toledo en el siglo XVI; otra sobre la historia arquitectónica de la ciudad de Santo Domingo, desde la colonia hasta el presente, pasando por la arquitectura republicana.
Otra exposición más de esqueletos y huesos de indígenas y de aquellos haitianos que combatieron contra las tropas haitianas en favor de los dominicanos, y que fueron donados al Faro generosamente por los arqueólogos Elpidio Ortega y Marcio Velóz Maggiolo, prosiguió.
Lamentó también que en una esquina del edificio encontró abandonada una colección de pinturas de reconocidos pintores dominicanos y extranjeros. Parecería que están en una celda de una prisión fuera de la vista de los visitantes desde hace más de quince años. Detalló que las obras son de los pintores Marianela Jiménez, Juan Francisco Pelletier, Rosa Elena Báez, Carmen Pool, Elpidio Ortega, Juan Medina, Rosa Tavares, Dionisio Pichardo, Carlos Antonio Mayol, entre otros.
La falta de vigilancia es otra de las preocupaciones del funcionario, pues pocos días después de su llegada, ladrones cargaron con tres lámparas de bronce, tres platos del mismo material y tres jarrones chinos de un alto valor económico que fueron luego recuperados por la Policía cuando pretendían vender algunas de las piezas por metal. En el 2011 fue robado el arcabuz del faro y encontrado casi de inmediato.
Tras el último robo Bonetti manifestó sus sospechas de que había colaboración interna, pues los ladrones entraron por una ventana que solamente quien trabaja ahí dentro la conocía y sabía que no tenía pestillo y que bastaba empujarla para entrar. El funcionario considera que hay que restaurar el Faro, y devolverlo al estado en el que estaba cuando fue inaugurado en 1992, con autonomía financiera y eléctrica, y con un panorama distinto.
