Fundación – Barahona.- Sectores evangélicos calificaron como un infierno las condiciones infrahumanas en que habitan decenas de familias de la comunidad de Algodón del municipio de Fundación de esta provincia. Dijeron que la gente vive en esas condiciones ante la mirada indiferente de las autoridades.

El pastor evangélico Desiderio Corniel Amador dijo que la falta de calles, el deterioro de las viviendas y el descontrol de las redes de electricidad son algunas de las problemáticas que afectan a esa empobrecida comunidad.

Aseguran son discriminados por algunas autoridades por ser de descendencia haitiana. Corniel Amador, pastor de la Iglesia Pentecostal Roca de Salvación, aseguró haber perdido las esperanzas en las autoridades gubernamentales y que ahora espera que Dios sensibilice el corazón de quienes dirigen las políticas públicas del gobierno central para que vayan a rescatarlos del lodo, el polvo, la oscuridad y las condiciones inhumanas en las que se encuentran.

Manifestó que en reiteradas ocasiones dirigentes comunitarios y evangélicos de esta localidad han encabezado planes de lucha que van desde comisiones con autoridades de la provincia hasta protestas y paralización en la carretera Barahona-Azua.

Indicó que vía gobernación provincial se les prometió que el presidente Danilo Medina ordenaría asfaltar sus calles junto a la construcción de la escuela básica de la comunidad La Altagracia, pero no han hecho nada.

Denunció que la salud de cientos de niños está en riesgo en esta comunidad por los charcos, el lodo y el acumulamiento de aguas negras producto del mal estado de las calles en tiempo de lluvias.

Indicó que más de diez manifestaciones en la carretera por donde circula en tránsito hacia Haití han ejecutado sus moradores en espera de que el Ministerio de Obras Publicas y Comunicación (MIOPC) les asfalte menos de 5 kilómetros de calles.

También los evangélicos esperan que la empresa EDESUR regule las redes eléctricas que están al borde de colapso.