Joao y Punta Catalina –
Hay dos razones principales por las que los dominicanos debemos preocuparnos con la persecución y apresamiento en Brasil del mercadólogo político Joao Santana.
Primero, porque el principal cliente de su empresa Polis Caribe, S.A., radicada en Bella Vista, Santo Domingo, es el presidente Danilo Medina, en su condición de candidato a la reelección presidencial.
Joao Santana es, públicamente afirmado por el propio presidente Medina, su asesor principal en propaganda e imagen.
Que Danilo busque la reelección no es ningún pecado, y que Joao se gane millones de dólares vendiendo sus servicios de experto tampoco viola nada.
El tema es que el pueblo dominicano tiene derecho a saber de dónde salen los fondos con que se paga tan generosamente a Joao, ya que Danilo, en su condición de presidente, maneja cientos de miles de millones de pesos del erario público y de los cuales no tiene derecho a gastar un solo centavo para provecho propio.
Entonces, las autoridades están obligadas a despejar dudas sobre el origen del dinero con que se está pagando a Joao en una cantidad que ni él mismo sabe, según declaró en Brasil.
Segundo, Joao Santana está siendo investigado por lavado y porque servía a Odebretch en la mecánica de soborno a presidentes y funcionarios en Brasil y otros países para conseguir contratos de grandes obras de infraestructuras.
En el interrogatorio practicado a Joao y publicado en los diarios brasileños esta semana, se menciona a la República Dominicana como una de sus bases de operaciones y fuente de pagos a Polis Caribe, empresa hermana de otras Polis creadas en Argentina, Panamá, Venezuela, etcétera; todas hijas de Polis Propaganda, brasileiña.
Como, según la justicia brasileña, la pareja Joao-Odebretch ha dejado una estela de contratos y sobornos que se extiende desde Angola, Colombia, Brasil, El Salvador, Venezuela, Perú y Panamá, entonces nadie debe extrañarse si – como el Zika – el contagio llega hasta Dominicana.
Es decir, hablando claro, los dominicanos tenemos derecho a saber si Joao tiene algo que ver con los 2040 millones de dólares de Punta Catalina, Odebretch y la reelección.
