Hasta la fecha, el PRD no les ha hecho caso a los más de 2 millones 130 mil votos obtenidos en las elecciones del 20 de mayo. Además, tantos votos no son propiedad absoluta del PRD, y así como llegaron se pueden ir.
Leonel Fernández, desde que descubrió el caminito para construir mayoría electoral estable (2004), influenciado por las experiencias de la mecánica electoral de los sistemas que requieren el 50% más uno, así como de la eficacia del nuevo populismo para aprovecharse de los programas contra la pobreza y forjar una clientela electoral dura en Venezuela, Ecuador, Bolivia, Brasil y Nicaragua; Leonel repito-, nunca ha descuidado su reserva electoral.
En ese tenor, parecía claro que la primera tarea que cumpliría el PRD después del 20 de mayo seria examinar con cuidado las vías para preservar la fuerza alcanzada y, segundo, eliminar los obstáculos internos y externos.
Conviene tener claro que el contexto de poder político nacional ha cambiado desfavorablemente para el PRD. Son cambios recientes, pero determinantes.
Hoy tenemos un tinglado de Altas Cortes que mantienen sitiado al PRD y blindado al PLD.
Hoy, prohibida la reelección consecutiva, Danilo, Leonel y Margarita se erigen en piezas efectivas para recambios electorales desde el propio PLD. Es decir, ellos tendrán más posibilidades ahora para venderse como el cambio seguro.
Por otro lado, la OEA y las famosas embajadas, han rebajado sus exigencias para elogiar unas elecciones. Para tales observadores, transparencia y equidad es finura para la cual la democracia dominicana no califica. Por eso, Tabaré Vázquez califico como ejemplar un proceso que en su Uruguay natal no lo hubiera aceptado ni por asomo.
En resumen, Miguel Vargas no podrá ser expulsado ni suspendido de su cargo en el corto plazo. Y todos sabemos por qué.
Y la confrontación interna sin salida rápida solo conducirá al desgaste y al desbarajuste.
La complejidad de la situación obliga al liderazgo del PRD a replantearse la estrategia desde perspectivas más amplias y realistas. Y en sus análisis debería incluir lo que hará para no espantar su enorme 47%.