Opinión

Diamante educativo

Diamante educativo

El maestro de maestros, Luis de León, es un diamante de la educación que se puede exhibir con orgullo a todo lo largo y ancho de la nación y mas allá. Nacido en la comunidad de Juan Gómez, municipio de Guayubín, de la histórica provincia de Monte Cristi, donde las manecillas de su histórico reloj se escuchan con timbres elocuentes y emotivos.

Desde muy joven se inclina a la doctrina del magisterio, y no tardando de realizar un doctorado en ciencias de la educación, así una maestría en educación, mención filosofía y letras, con una sólida formación académica, incluye cursos intensos y monográficos sobre prácticas, oratoria, filosofía, economía y lingüística.

Su ingente labor educativa es conocida nacional e internacionalmente, habiendo recibido importantes y altos honores en el país y galardonado con en el grado de caballero de la orden de mayo por el gobierno argentino, en reconocimiento a su brillante labor en la dirección del liceo Argentina de esta ciudad, y también ha escrito diversas obras que ha enriquecido el parnaso dominicano.

El licenciado Luis A. de León no solo es un artífice de la enseñanza dominicana, sino un ser humano dotado de prendas morales, cívicas, éticas y un consagrado luchador con la esencia de nuestra nacionalidad, soberanía, libertad y un virtuoso dominicano de relevante conducta moral, valor, honestidad, sustentador de las freses de nuestro insigne Juan Pablo Duarte y del grandioso José Martí al decir: ¨la patria es el lauro, agonía y deber¨.

Y Luis de León, sin ninguna expresión de lisonja sino con apego a la verdad, puede expresar que en todos los grados de la enseñanza, se impone la educación y la práctica de la moral, desde todas la edades biológicas y se haga de la ontogénesis el sentido de moralidad que le sirve para hacer de la propia existencia un oasis del recto vivir.

Proclamamos con sencillez, que educar para el patriotismo, la paz y la lealtad, como viene realizando el Lic. Luis de León, es elevación y prestigio que se hace fijar la conciencia con un matiz de dignidad en todo el trascurso de la vida. En la actualidad, es viceministro de gestión y de descentralizacion educativa de dicho ministerio.

El reconocimiento al trabajo, al servicio y labor de un hombre es prenda sublime del corazón, y por lo tanto, Luis de León debiera ser promovido porque reúne las condiciones sublimes requeridas para ocupar una posición cimera en la administración pública.

Con motivo de la celebración de la efeméride de nuestra restauración, quiera Dios que el señor presidente de todos los dominicanos, Lic. Danilo Medina, pondere la promoción del académico Luis A. de León, por sus méritos ciudadanos y por ser un abanderado del trabajo social, educativo, moral con la trasparencia y los ideales de nuestros forjadores, Duarte, Sánchez, Mella, Luperón y otros bizarros de nuestras luchas patrias y libertarias.
¡Honra a quien honor merece!

El Nacional

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