El Nacional
LOS ANGELES (De MLB.com).- Lo nuevo acerca de Manny Ramírez y los Dodgers, con el Entrenamiento Primaveral comenzando en cuatro semanas, es que no hay nada nuevo.
El gerente general Ned Collettti dijo que habló con el agente Scott Boras acerca de Ramírez a comienzos de esta semana, pero que nada ha cambiado en la posición del equipo o del jugador.
Hay un diálogo, dijo Colletti, lo cual por lo menos es un progreso desde los primeros dos meses de la época libre.
Los Dodgers aún quieren a Ramírez, pero por un corto plazo. Ramírez, quien cumple 37 este año, aún quiere un mínimo de cuatro años. Esas posiciones fueron señaladas durante las reuniones de los Gerentes Generales en noviembre, cuando los Dodgers hicieron la única oferta conocida que Ramírez ha recibido dos años por $45 millones, más una opción de $15 millones por un tercer año. La oferta fue ignorada y retirada.
Dos cosas han cambiado desde entonces. Una es el surgimiento de los Gigantes como una potencial alternativa para Ramírez, aunque oficiales de San Francisco han indicado que ellos tampoco tienen estómago para un pacto de largo plazo. Un contrato de largo alcance para Ramírez a su edad tendría más sentido para un equipo de la Liga Americana con el bateador designado disponible, pero no se conoce que haya surgido alguno.
De mayor impacto, quizás es el colapso económico y su aparente efecto congelador en el actual mercado de agentes libres. Exceptuando a los Yankees, la mayoría de los clubes están escogiendo agentes libres de la manera que los americanos hicieron con los regalos de Navidad buscando bagatelas. Ellos están comprometiendo menos dólares por menos años.
Cinco agentes libres este invierno han recibido contratos de cuatro años o más, tres de llos por los Yankees Mark Teixeira (ocho años), CC Sabathia (siete años) y A.J. Burnett (cinco años). Los otros son Ryan Dempster (cuatro años) por los Cachorros y Derek Lowe (cuatro años) por los Bravos. Cuando los Yankees apuntaron hacia Teixeira como su adquisición de un bate grande, recortó la probable guerra de pujas por Ramírez.
El dueño de los Dodgers, Frank McCourt, así como Colletti, han sido claros de que la estrategia general de la franquicia es desarrollar desde adentro, mientras que los inciertos ingresos de este año no han sido ignorados mientras planeaban para 2009. Los Dodgers no anuncian una meta en cuanto a la suma de su nómina de pago, pero está claro que el total de este año será dramáticamente más bajo que los $120 millones del año pasado después de la partida de 15 agentes libres y la adición de sólo tres hasta ahor.
Actualmente, los Dodgers tienen comprometidos $62 millones con ocho jugadores de su plantel y tres jugadores salientes Andruw Jones, Brad Penny y Gary Bennett. El replanteo del contrato de Jones para su licenciamiento difirió $16 millones que de otra forma habrían sido pagados este año, aportando la necesaria flexibilidad.
Aún si ellos añaden a un veterano lanzador agente libre, sin embargo, la nómina de pago podría caer este año al nivel de $100 millones si ellos firman a Ramírez o cerca de $80 millones si no lo hacen. Ellos parecen comprometidos a esperar a Ramírez, haciendo la adquisición de un bateador alternativo poco probable mientras la situación de Ramírez esté sin resolver, aún si eso significa entrar a la temporada sin la adición de un productor de carreras.
De la manera como está la economía, no se puede predecir nada de una manera confiable, dijo Colletti. No hay forma de saber como se comportará la base de fanáticos con la economía. Como resultado, esta campaña podría ser más dinámica que cualquier otra. Tradicionalmente, uno puede predecir sus ingresos y la nómina de pago. Este año, podría haber movimiento todo el año mientras vemos las cosas desarrollarse.
