Opinión

El Bulevar de la vida

El Bulevar de la vida

” Y avíseme si volviera, no es por capricho. Le juré amor eterno y no quisiera quedar en entredicho” JMSerrat.

Era inevitable. Después de tantos éxitos como cinco triunfos electorales seguidos. Con un ex presidente que en 16 años ha ganado tres comicios con más del 50% de los votos. Con influencia importante en prácticamente todas las instancias de poder del país, salvo el CONEP y La Embajada que, astuta ypolíticamente correcta se apoya en SU “sociedad civil” y SUS periodistas y sus medios… después de todo eso, era asunto de tiempo que al PLD “muertecito de éxitos” fueran llegando los malos tiempos, y se vaya iniciando en ese partido, un proceso de perredeización indetenible.

 Hablo de un partido donde el Síndrome Leonel Fernández (SLF) ha desbordado las desbordadas ambiciones o los viejos resentimientos de mucho gente. El SLF le va a hacer mucho daño al PLD, como ha hecho a toda la vida social es institucional del país.

¿Y qué es el Síndrome Leonel Fernández?

El SLF se explica en el hecho objetivo de en agosto de 1996 llegó a la presidencia de la República un joven de apenas 41 años, cuyo cargo más alto en su vida pública o privada había sido el de responsable de comunicaciones de un arrogante, disciplinado, trabajador y prepotente partidito de algo más de 10 mil miembros. Me refiero a un joven del cual 23 meses atrás, nadie -salvo SU madre, Diandino Peña, una comadre, Leo Corporán y Luis Manuel Bonetti- podían pensar que llegaría  a ser el jefe del Estado… y para colmo, resultó que junto al hoy presidente Medina, al entonces vice Fernández Mirabal, y su Comité Político, encabezó uno de los gobiernos mejor valorados por los dominicanos en la mayoría de las encuestas.

Ante el síndrome SLF, cómo evitar que ahora, fuera Fernández del poder e insistente el presidente Medina en afirmar  que NO modificará la Constitución para repostularse, en el PLD de cada 10 miembros del CP o CC  por los menos 12 se crean presidenciables y casi presidentes. ¿Por qué no?

Atrás queda la vieja reflexión del ex vice presidente Fernández Mirabal: el asunto no es aspirar sino que a uno lo aspiren. Y ahí anda el PLD, descubriendo el hilo en bollitos, e inventando feliz el helado en palito y la cura exacta para el pecho “apretao”.

El Comité Político del PLD debe, con extrema urgencia, crear nuevas normas para poder aspirar en ese partido, a menos que se quiera convertir en un “hormiguero pateado”.

Es la rueda que no deja de rodar en la política dominicana.  Ahora toca el turno al PLD. Lo del PRD ya lo sabemos, lo padecemos. Entonces, ¿adónde va el buey que no ara? ¿Podrá sobrevivir por mucho tiempo una democracia sin demócratas ni partidos democráticos?

Lo de Anthony Santos, vitoreado por todo el Teatro Nacional en Los Soberanos, y vuelto a subir a escena sin inconveniente alguno después de su reivindicación del perínclito, es solo un síntoma. Con su permiso…

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