Ella es la más valiente
Uno piensa que cuando ha vivido mucho y lo ha visto todo, pero no es así. Uno siente, a veces que es valiente cuando ha vencido barreras para llegar y nos sentimos lo máximo, hasta que alguien, que te supera en valentía y dignidad, te deja convencido de que estás por debajo de ella.
Juana, deja ese sentimiento que mezcla lo amargo con lo dulce y se complementa con una gran admiración. Ella es una mujer simple, gruesa, de unos 45 años, con cara segura y pasos firmes. La ves y parece común, con una vida como la tuya o la mía, pero en realidad, no lo es. Ella es la más valiente, la más dulce y la más decidida del universo. La vi en una charla de orientación, en la que todo el mundo se paraba y contaba sus problemas, que parecían graves, pero se empequeñecieron, cuando ella contó los suyos. Juana dijo que durante un tiempo había perdidola razón y dejó a entrever que su familia era un factor influyente en que no mejorara. Confesó que se había tenido que alejar de ellos, porque sino, no sería la persona ecuánime y razonable que era ahora.
Aquella mujer hablaba con alegría por sus logros, pero con dolor por el camino que habia tenido que atravesar para llegar a ellos. Contó que ahora vivía aparte de su familia y que las visitas de su madre la deprimían, por lo que entendía que debia estar alejada de ella. Dijo, con dolor, que habia tenido que decirle a su madre que no la visitara. Y fue entonces, cuando preguntó con la voz quebrada, cómo hacía para no dañar a la madre tanto amaba con el rechazo que debia mostrarle, por su bien.
Es una de las preguntas más difíciles que nunca había escuchado y ansiosa esperé la respuesta. La famiia de Juana, quien la abandonó cuando estuvo interna en un lugar para enfermos mentales, insistía en calificarla como enferma. Recordándole con el mote de loca, el tiempo en que por la muerte de sus hijos en circunstancias catastróficas, ella había perdido la visión de la realidad.
Ellos la dañaban mucho y tenía que alejarlos, siendo egoista para lograr su estabilidad. Juana concluyó diciendo que estudiaba segundo del bachillerato y había ganado 95. Los aplausos sonaron estruendosos. Felicidades Juana.
