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Utilizo para esta aclaración el incidente en Los Ciruelitos, y lo hago para demostrar lo lejos que ha llegado la confusión promovida por el vinchismo sobre el nacionalismo. En efecto, el hecho de que el comité que quemó la bandera haitiana se llame Francisco Alberto Caamaño y que al mismo tiempo enarbole las ideas del asesino de Caamaño: Joaquín Balaguer, quien diviniza a Duarte para despolitizar el contenido de sus principios, es solo una muestra de hasta donde ha calado el menjunje ideológico con el cual el sector más atrasado de las ideas del país, declara traidores a verdaderos patriotas. Veamos:
1.-Juan Isidro Jimenes Grullón afirma que el nacionalismo surgió en la época del Renacimiento y permaneció en latencia hasta la emancipación norteamericana, pero que fue a raíz de la Revolución Francesa cuando comenzó a cobrar vigor y a extenderse. ”Al proclamar los Derechos del Hombre, el trascendental suceso despertó el afán de liberación de los pueblos oprimidos, y dio así origen a la rebelión de los esclavos en Haití y a la ulterior creación del nuevo Estado haitiano”. También influyó en la emancipación norteamericana y en las guerras de liberación nacional de nuestra América.
2.-Duarte “siente los vagidos de este despertar y pensando en su tierra se da cuenta que “entre los dominicanos y los haitianos no es posible una fusión porque ambos pueblos responden a culturas diferentes y en cada uno de ellos late un ‘espíritu peculiar’ que hacía imposible la simbiosis”, concepto que respondía, según Grullón, al romanticismo histórico.
3.-De regreso se lanza a propagar esta doctrina, pero “tal radicalismo no implica chauvinismo. Duarte llegó a decir: Yo admiro al pueblo haitiano desde el momento en que, recorriendo las páginas de su historia, lo encuentro luchando desesperadamente contra poderes excesivamente superiores y veo cómo los vence y cómo sale de la triste condición de esclavo para convertirse en nación libre e independiente. Lo reconozco poseedor de dos virtudes eminentes: el amor a la libertad y el valor”. Y, continúa señalando Grullón, “su nacionalismo no revela, pues, anti-haitianismo. Solo sustenta el derecho de nuestro pueblo a constituirse en nación libre e independiente, pues poseía las condiciones para ello”.
4.-Duarte, hizo suyo el concepto de que “la patria es superior a los reyes y a los magistrados, comprende a todas las clases sociales. A toda clase de gente, al rico y al pobre, tanto al grande y al famoso como a la multitud desconocida”. Tuvo fe, en la bondad ingénita del hombre y este humanismo lo llevo a enfrentarse a los remanentes del prejuicio racial.
