Opinión

EL PRD mayoritario: un partido para una gran Convergencia

EL PRD mayoritario: un partido para una gran Convergencia

Creemos no ser los únicos que se sienten preocupados por el papel que corresponde al núcleo perredeístas que se ha dado en llamar Partido Revolucionario mayoritario. Y esto así, porque, a dudar, la gran mayoría de sus integrantes tiene la convicción de que la sociedad dominicana precisa de un partido político que reafirme la decisión de crear en nuestro país un real y justiciero sistema democrático.

Si bien se habla de Convergencia como una fuerza política aglutinadora de ese PRD mayoritario, al mismo tiempo, y de manera recurrente, se llevan a cabo intentos para promover conversaciones, arreglos políticos y entendimientos personales con la parcela minoritaria que dirige Miguel Vargas Maldonado. Vale decir, con la parcela incompatible con las esencias progresistas que nutrieron al Partido Revolucionario Dominicano de José Francisco Peña Gómez.

Nuestra preocupación frente a ese proceder no es excepcional. Son miles los perredeístas que de forma insistente se preguntan por qué el PRD mayoritario no acaba de asumir de forma institucional una actitud política contraria al PLD, desligada de la traición y el atraso y orientada por una visión democrática auténtica, independiente, negadora del clientelismo, de la corrupción, de la impunidad, de la mentira, del derroche.

Es decir, esa preocupación y ese anhelo se expresan, asimismo, en la sentida necesidad de sedimentar las bases adecuadas para la orientación de un organismo político palpable, identificable, institucionalizado de acuerdo a las exigencias de la ley. Más de una vez hemos dicho que la Convergencia no es un partido, sino una coalición de fuerzas políticas.

De allí la necesidad de contar con un partido, con un organismo que permita canalizar y formalizar las perspectivas del PRD mayoritario. Un partido que la Junta Central Electoral no pueda objetar ni impedir su creación con subterfugios leguleyos. Un partido que sirva de vocero y de atalaya para divulgar y ejercer los presupuestos ideológicos de ese PRD mayoritario. Un partido que frente a las exigencias de la Ley Electoral facilite los trámites del ejercicio político y el decurso de las ambicione sanas. Es pues, requisito prioritario para que el PRD mayoritario pueda actuar de manera orgánica, la adopción de un partido que se constituya en la representación de sus perspectivas ideológicas, tácticas y estratégicas. Y una vez alcanzada esa meta, reforzar los lazos ya anudados en la Convergencia existente y hacer un llamado a todos los dominicanos, a todos los partidos democráticos y a los ciudadanos independientes para la justa armonización de una gran Convergencia. Tenemos el temor de que no proceder de esa suerte con tiempo es correr el riesgo de hacer las cosas apresuradamente y sin el equilibrado concierto de voluntades capaz de ofrecer la certeza de que el PRD mayoritario es la vía idónea para encauzar el desarrollo equitativo de todos los dominicanos.

El Nacional

La Voz de Todos