Violencia de género
El drama de la muerte. El luto y la desesperanza acompañan a muchas familias de esta zona. Es como un fantasma que regresa periódicamente. Es una agenda que marca a hombres y mujeres. La intolerancia humana con vestido de irracionalidad va imponiendo nuevas marcas. El más reciente caso es el de un conocido ebanista muerto por su esposa de una puñalada la mañana de este lunes. El suceso ocurrió en la comunidad La Peña, Monte Adentro.
Las versiones van y vienen. José Rafael Osoria, de 42 años, murió de una herida punzante en el tórax que se la provocó su mujer Joseline del Carmen Osoria Batista, de 38 años. La pareja tenía una relación de 15 años y tres hijos.
Ella ahora en la prisión alega que cometió el hecho supuestamente por la violencia que ejercía su pareja constantemente y que se había querellado en varias ocasiones.
Parece esto una historia repetida. Muchas interrogantes quedan sueltas. Lo más dramático es el dolor de unos hijos sin padres porque él está en el cementerio y ella en la cárcel. Queda el dolor de una comunidad que aún se pregunta por los motivos del suceso.
Esto deja heridas que tardan en sicatrizar en la conciencia colectiva. Esta es una razón para ver la violencia de género como un problema de salud pública. Es hora de que el Estado se levante y apoye a quienes tratan de evitar este drama de muerte que nos persigue.
Parque Central
Iniciando la semana se abrió una esperanza por el anhelado proyecto del Parque Central. El Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales ha reconocido públicamente que el mismo es una prioridad para la ciudad de Santiago.
Se reunió con representativos de aquí. Aunque no ha dicho si el gobierno cumplirá con su parte, Domínguez Brito y sus cercanos han visto esta necesidad y nunca queda mal una promesa más.
