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EN EL PEDESTAL

EN EL PEDESTAL

Rodríguez Urdaneta Artista plástico dominicano
Su obra, a pesar de crear precedentes en las diversas expresiones en las que dejó sentir su impronta creadora, no ha sido todavía ubicada en el pedestal que merece: el de una figura cimera de primer orden en la plástica dominicana, con la excepción de los justos reconocimientos que le han hecho críticos de la plástica nacional.

 
Abelardo Rodríguez Urdaneta fue pintor, escultor, fotógrafo y formador de artistas, de cuya obra se plantea la interrogante ¿es éste el artista plástico más completo de finales del siglo XIX y principios del siglo XX?

 
La justicia se la han hecho, en textos críticos por separado, Jeannette Miller, Cándido Gerón, Marianne de Tolentino y el Museo Bellapart, coinciden en la fuerza creadora de este artista de expresiones gráficas por la perfección del clasicismo de su pintura, la impecable terminación de sus esculturas y el dominio magistral de sus dibujos, a lo que añade el precedente de ser uno de los primeros fotógrafos artísticos, en cuyas obras mostró un manejo estético de la luz.

 
La gente común, la comunidad no allegada al mundo de la plástica, es víctima de un desconocimiento casi total de la trascendencia de la obra de Abelardo Rodríguez Urdaneta.

 
La obra de Abelardo está marcada por la tendencia clásica y romántica (sobre todo en la pintura, la escultura y el dibujo).

 
Era un artista dotado de una capacidad de observación y de una infinita paciencia para concretar su obra, para sólo llegar al nivel más alto, el de los maestros.

 
El libro Pinacoteca del Banco Central, (proyecto iniciativa de Miguel Reyes Sánchez y José del Castillo, con edición de Carmen Beatriz Rodríguez y textos de Danilo de los Santos y Marianne de Tolentino, editado en 2009), recoge la trascendencia de la obra de Rodríguez Urdaneta.

 
Indica Marianne de Tolentino en Pinacoteca del Banco Central:” Abelardo Rodríguez Urdaneta…sin haber terminado sus estudios académicos y dotado de una personalidad singular, se formó concienzudamente en el arte, llegando a dominar el oficio en tres categorías: pintura, escultura y fotografía; vaticinando la polivalencia de los artistas de hoy”.

 
Jeannette Miller sostiene: “La obra de Abelardo Rodríguez Urdaneta fue la más significativa a fines del siglo XIX y principios del XX. De temperamento romántico y hechura clásica, Abelardo llena las tres primeras décadas del siglo XX con su fuerte personalidad creativa. Mantuvo una Academia de dibujo, pintura y escultura desde 1908 hasta 1933, año en que murió. Fue además dibujante y músico. Se le considera el precursor de la fotografía artística dominicana”.

 
Añade que se le considera padre de la escultura dominicana y se cita su obra “Uno de Tantos”, como la más importante, mientras que entre sus obras pictóricas se destaca “Cabeza de Mujer”.

 
Cándido Gerón sostiene que está considerado como uno de los más completos precursores de las artes plásticas. Su concepción romántica y su factura clásica, permiten conocer sus sobrias pinceladas, su refinado dibujo y sus variadísimos aspectos del paisaje, matizado de construcciones armónicas y un colorido rico y abundante. Fue el maestro que formó a la pintora dominicana Celeste Woss y Gil. Murió en 1933.

El Nacional

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