El Ministerio de Salud Pública ha exhortado a la población a observar muchas precauciones con el agua para prevenir enfermedades en esta temporada de lluvia. Pero el drama de los residentes en diferentes sectores de Santiago consiste en que es turbia el agua que reciben de la Corporación del Acueducto y Alcantarillado (Coraasán).
La entidad ha minimizado el problema alegando que no se trata de ningún riesgo, sino de un químico que pone el líquido del color que preocupa a los quejosos. Los denunciantes estiman que la explicación traduce indolencia, porque precisamente a causa de la supuesta contaminación se han tenido que llevar muchos niños a centros médicos con problemas cutáneos.
Tal vez Salud Pública o el Ministerio de Medio Ambiente tendrán que intervenir para analizar con la debida propiedad la calidad del agua que los residentes en varios sectores de Santiago alegan que es turbia y que les ha causado problemas, pero que Coraasán califica de saludable.
