¿Qué Pasa?

Entre el cielo y tierra

Entre el cielo y tierra

Mary Leisy Hernandez

Primavera en el sur

Brasilia. Brasil. Estoy en primavera cuando mi gente dominicana está viviendo el otoño. Por suerte, tanto en mi país como en el país donde vivo, primavera y otoño es casi lo mismo o por lo menos eso parece.

El otoño existe aunque no se note. Igual el invierno y todas las estaciones. Cierto que en nuestros otoños, en nuestro cálidos países no caen todas las hojas de los árboles como sucede en lugares fríos, pero igual, aunque no se vea, el otoño prepara y transforma la naturaleza para darle paso a una primavera verde y colorida. A un tiempo de hojas y flores nuevas.

Me toca vivir en un país del hemisferio sur en el que pocas festividades se celebran en las mismas fechas que en el mío. El día de los enamorados en junio, las grandes vacaciones a principio de año y no en agosto, en fin. En la mayoría de los casos, cuando en mi país es día de fiesta aquí es día de trabajo y viceversa.

Algunas fechas que en mi país se celebran con algarabía como el día de las secretarias, aquí pasan prácticamente sin pena ni gloria e igual, otras que acá son muy celebradas, allá poco se mencionan o no se celebran.

Venir a vivir a Brasil desde Europa fue cambiar a un país más parecido al mío, solo que cambiar de hemisferio marca una diferencia pese a que son dos países tropicales y con cultura muy próximas.

Lo bueno es que algunas festividades las celebro dos veces: En una fecha a la dominicana y en la otra a la brasileña. Celebro el día de las madres el segundo domingo de mayo como los brasileños y el último domingo del mismo mes como los dominicanos.

En fin, aunque hace ya más de cinco años que no vivo en mi país, mi corazón celebra y se siente en primavera en marzo, abril y mayo como en el hemisferio norte e igual de septiembre a diciembre como se vive en Brasil y todo el hemisferio sur. La primavera la vivo según mi corazón y poco tiene que ver con el país y el hemisferio en el que vivo.

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