¿Qué Pasa?

Entre el Cielo y Tierra

Entre el Cielo y Tierra

Bruselas, Bélgica. Yo misma cociné el plato típico de la navidad dominicana con orégano traído de mi tierra para mostrar lo más tradicional de la cocina criolla en un encuentro domínico-andaluz que celebramos el sábado en la capital de Bélgica.

La noche antes me acosté bien tarde preparando el sazón, sazonando la carne y pelando los guineítos y la yuca que fui a comprar en el mercado africano de Bruselas.

El menú incluyó un moro de guandules con coco, casabe al ajillo, ensalada de aguacate, lonjas de plátanos maduros, frutos tropicales, guineítos encebollados y otras delicias que encantaron a dominicanos, españoles, belgas y a amigos de otras nacionalidades.

Fue un encuentro muy alegre, en el que se mezclaron los elementos culturales de la región andaluza con los de Dominicana, un encuentro en el que la música, el arte culinario, el vestuario y otros detalles de ambas tierras estuvieron presentes.

De un lado la bandera tricolor Dominicana y otros detalles que hablan de nuestra cultura, del otro, resaltaban los abanicos y el amarillo de la bandera española y de ambos los colores y sabores del arte culinario de los dos

lados.

 Fue un encuentro muy alegre. Los españoles con toda la riqueza de su culinaria: sus tapas, sus aceitunas, su sangría, su queso manchego y sus diversos productos ibéricos. Los dominicanos mostramos como se baila la bachata, la salsa y el merengue y los españoles nos dieron instrucciones de

sevillana, paso doble y otros ritmos muy típicos de España.

La idea fue de mi amiga andaluza para celebrar su cumpleaños y el mío.

Yo me vestí con el traje típico dominicano y ella se puso su manta y su flor típica de las sevillanas.

Fue una manera maravillosa de celebrar mi cumpleaños fuera de mi tierra sintiéndome cerca al mostrar todas las riquezas de la cultura de mi país.

El Nacional

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