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Escritores militares dominicanos Desde la fundación de República Dominicana en el año 1844 apenas una docena de militares han escrito obras o han sido articulistas de diarios y revistas

Escritores militares dominicanos  Desde la fundación de República Dominicana en el año 1844 apenas una  docena de militares han escrito obras o han sido articulistas de diarios y revistas

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Apenas una docena de militares dominicanos han escrito obras o intervenido en artículos en diarios y revistas en 172 años de fundarse la República Dominicana en 1844, y esto así, porque los militares son escuetos, reservados, signados por la consigna “no tengo conocimiento”, factor psicológico y psicorrígido en la cosmovisión del “gancho” analizado por el psiquiatra Antonio Zaglul.
Esa densa sombra suspicaz impidió que los generales Víctor Elby Viñas Román y Enrique Pérez y Pérez, ministros de las Fuerzas Armadas (FFAA) y Marcos Jorge Moreno, jefe del Ejército, declinaran mis persistentes sugerencias de organizar sus memorias para yo redactarlas y publicarlas en un libro, que de seguro sería un best seller.

Viñas Román de plano declinó. Jorge Moreno siempre me insistió que lo haríamos, pero nunca decidió. Pérez y Pérez fue más locuaz cuando me expresó: “Si yo hablo, tiembla la tierra”, entonando sus ojos de miel y agarrando los brazos de su asiento.

Es que los militares protagonizan momentos estelares en sus países, cuyos pormenores son renuentes a airear, en el nuestro, en el caso de Viñas Román, ministro de las FFAA en los gobiernos del Consejo de Estado presidido por Rafael Bonnelly, Juan Bosch y El Triunvirato presidido por Donald Reid Cabral.

Concerniente a Jorge Moreno, era jefe policial cuando estaban presos los héroes del 30 de mayo, y luego de conducidos al Palacio de Justicia de Ciudad Nueva el 18 de noviembre de 1961, el amo entonces del país, teniente general FAD, Ramfis Trujillo, ordenó, ni siquiera al jefe policial, sino al jefe de escoltas de los presos, enfilar con ellos hacia la hacienda María en Nigua, y ahí Jorge Moreno ni conocía la orden ni mucho menos de saberlo podría oponerse. ¿O podía, con el poder y la psicopatía de Ramfis?
El general Pérez y Pérez combatió a los expedicionarios del 14 de junio de 1959, en Maimón, siendo capitán del Ejército; jefe policial y ministro de las FFAA en los dos primeros gobiernos del presidente Joaquín Balaguer, en la etapa dura de los Doce años (1966-1978), de liquidar a los dirigentes del MPD, conforme la política del presidente Richard Nixon en el vórtice de la Guerra Fría surgida post II Guerra Mundial, conforme explicó al presidente Joaquín Balaguer a el embajador Hugh Crimmins.

Describiendo luego del imperativo introito la discreción y renuencia de los militares a escribir, el primero que empezó la tanda fue el general Gregorio Luperón en su Autobiografía, tres tomos, 1895, que no pocos historiadores señalan a Manuel Rodríguez Objío como su autor, porque en la biografía del que historiadores definen como La Primera Espada de la Restauración escrita por éste, el estilo narrativo es el mismo de Rodríguez Objío en su obra, dos tomos, Gregorio Luperón e Historia de la Restauración, Editorial El Diario de Santiago de los Caballeros (1939), porque el estilo, se afirma, es el hombre.

Discurrieron 79 años para que en 1942, el almirante Ramón Julio Didiez Burgos publicara su obra Guanahaní o Mayaguanin, alusiva a la isla donde pisó por primera vez tierra en el Nuevo Mundo el almirante Cristóbal Colón.
En 1955 el coronel del Ejército Nacional (EN), Ernesto Vega Pagán, publica la más completa biografía militar del generalísimo Rafael Leónidas Trujillo en ocasión de sus 25 años de gobiernos despóticos.

En 1954 el almirante ARD, Luis Homero Lajara Burgos, escribió su obra “Misión naval a España”, que reeditó en 2009 su hijo almirante Luis Homero Lajara Solá (Homerito), junto al mayor general ® EN Ramiro Matos González. Lajara Burgos fue articulista de diarios como es su hijo. Lajara Burgos escribió el libro “Por qué se produjo la revolución de abril 1965” (1987, Editora Taller).

En 1975, José Miguel Soto Jiménez, con el rango de primer teniente EN debuta como escritor publicando el opúsculo de poemas “Otras muertes”, que seguirían las obras de historia; “La reconquista de Juan Sánchez Ramírez” (1986); “El corrido de los taitas” (1995); “Las fuerzas militares de RD” (1996); “Defensa, seguridad y democracia” (1998); “Los motivos del machete” (2000); nueva edición de “Motivos del machete” (2001); “Memorias de Concho Primo” (2006); “Malfiní” (2010); “Memoria de la guasábara” (2010); “El estrategicón” (2014); “Las 58 leyes del poder de Juancito Trucupey” (2015).

Soto Jiménez fue durante unos años asiduo articulista jueves y sábado de Listín Diario, que suspendió. Es el escritor militar más prolífico, de cultura enciclopédica. Miembro de Número de la Academia Dominicana de la Historia desde 1997.

En 1984 Nelson Antonio Arciniegas Valentín, capitán de corbeta ARD, publicó su obra Historia de la Marina de Guerra; Obras de Instrucción Naval Militar en Santo Domingo y Trayectoria de la Fuerza Aérea Dominicana. Ese año el mayor general ERD Manuel Antonio Cuervo Gómez publicó su libro “Otra Tertulia en la Ciudad Corazón”. También publico el libro “Napoleón”.
El mayor general ® ERD Ramiro Matos González ha publicado “Perfiles Biográficos Militares de la Independencia”; “Evolución del escudo dominicano”; “Azua en la historia”.

El Nacional

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