La clase de cívica
Aún recuerdo esos días a la una de la tarde, faltando cuarenta y cinco minutos para terminar el día en el colegio y la profe comenzaba sus cátedras de educación cívica, una clase ligera sin fórmulas, fechas o sucesos históricos que recordar. Tomábamos a relajo la clase y siempre nos repetían “recuerden esta clase cuando sean mayores, les harán falta estos conocimientos”.
El Estado se divide en tres poderes: Legislativo, Ejecutivo y Judicial. Legislativo hace las leyes, Ejecutivo la hace cumplir, y judicial impone sanción a quien las viole.
Nuestro país es Presidencialista. Se le da más importancia al Poder Ejecutivo, como si fuera el primero que es Legislativo.
Quizás porque es quien ejecuta las obras, hace cumplir las leyes y es quien recauda, administra y reparte el dinero de los contribuyentes.
Esta organización está hecha de manera general, como sucede cuando el agua es muy grande para el envase: salpica y sale. Entonces están las alcaldías, pequeños estados dentro de un gran Estado.
El mini Estado llamado alcaldía, está compuesto por un mini poder legislativo, formado por concejales y regidores, encargados de dictar las normas del gobierno local.
Un mini Poder Ejecutivo formado por el alcalde o síndico, encargado de hacer cumplir esas normas dictadas por la sala capitular.
Las normas que puede dictar la sala capitular son las relativas a impuestos municipales, seguridad vial o tránsito, ambiental, limpieza.
Para la protección de las leyes se le ha dado competencia al Poder Judicial en material municipal.
Como podemos ver una Alcaldía es un Mini Estado creado a fines de que en un Municipio controle los problemas de seguridad, medio ambiental, de transito, ornato y limpieza.
Lo cierto es que todas las Alcaldías deben dictar normas relativas a seguridad, formando policías municipales que protejan el municipio del desorden y la delincuencia.
Todos los municipios deben dictar normas relativas al tránsito de vehículos de motor, organizando las paradas de motores y los sindicatos que se dedican a conchar, tanto en carro como en motor, ordenando que todo motor que transite en ese municipio debe estar identificado con un color y un número y el que no tenga eso, se sabe que no es del municipio.
Por supuesto, que todo es en teoría, porque en la práctica el Poder Ejecutivo lo controla y decide todo, dado que la descentralización no existe en una nación presidencialista, como es esta.
