Como nada en la vida es eterno y la caída del Imperio Romano es el mejor referente histórico, así tenía que llegar a su fin el bloqueo impuesto por Estados Unidos contra Cuba desde hace 63 años.
Las decisiones políticas y económicas obedecen a coyuntura del momento, eso pasó con Cuba al declararse estado socialista a penas a 90 millas náuticas de la cuna del capitalismo y en un momento donde las tensiones entre EU y la URSS se incrementaban.
Pero ahora el escenario político mundial ha cambiado, el socialismo fracasó en la mayoría de los países y Cuba dejó de ser amenaza para EU.
A esto hay que agregar que el envejecimiento de los hermanos Castro y de otros líderes de la revolución cubana, así como de sus opositores exiliados en Miami, sin dudas comienza alterar los equilibrios políticos dentro del Partido Comunista Cubano.
Así como la capacidad de Estados Unidos para producir petróleo y gas natural a precios extremadamente bajos ha sido una de las razones por la que la decadente dictadura de los hermanos Castro en Cuba haya cedido a la propuesta del Papa Francisco para iniciar un diálogo sincero.
Cuba necesita urgente una alternativa económica y, sorprendentemente, ha terminado encontrándola en su archienemigo, Estados Unidos.
Esto dice mucho del pronóstico que sobre Venezuela tienen los bien informados cubanos, cuando deciden abandonar a su generoso e incondicional país títere para abrirse a las inversiones, el comercio y el turismo estadounidenses.
Más calladamente, grupos económicos han estado haciendo presión en Washington para aflojar la política del embargo que considera que les impide hacer negocios en Cuba, los negocios que otros países y empresas están aprovechando.
La Cámara de Comercio de EU estima que se pierden al menos 1.200 millones de dólares en negocios que no se pueden hacer con Cuba debido a las leyes del embargo y aunque para la economía estadounidense no es una cifra grande, representa una buena porción de la cubana.
A esto hay que agregar que una nueva generación está al frente del Partido Comunista Cubano, personas que no estuvieron durante la toma del poder, no lucharon en Bahía de Cochinos ni recuerdan la guerra fría.
