Opinión

ESTO PIENSO, ESTO CREO

ESTO PIENSO, ESTO CREO

Se le viró al jefe, como lo hacen los buñuelos, en el aceite caliente

No me explico el discurso, en verdad no me puedo explicar si proviene de algún problema patológico o proviene de la desfachatez que identifica a una mayoría increíble de políticos con ganas de saciar sus ambiciones personales, para lo cual no reparan en amistad, lealtad, agradecimiento, ética o moralidad.

Desdoblan su personalidad, su discurso y lo que ayer era su norte, como la lealtad de un perro para su amo, en un abrir y cerrar los ojos se convierte en todo lo contrario y eso, simplemente, da asco. “Esta bueno de yo atajar y que otro enlace” y al parecer sabe lo que dice y a que se refiere, no dejando tampoco de tener cierta razón, no por las cosas que se ven en política sino, por aquellas que se producen en las penumbras de los intereses y allí mismos se quedan perdidas. Y más, cuando se conoce muy bien el endeudamiento, la intríngulis que esto ha conllevado y la indolencia de no importarle quienes, en definitiva, pagaran por la misma.

“El pasado no resolvió los problemas de pobreza y desigualdad” y en eso, está más claro que lo que usted considere claro. Muy a pesar de lo cual, es la misma persona que asegura la utopía, que más de medio millón de personas abandono la condición de pobre… ¿Entonces qué? ¿Dónde dijo lo que dijo no fue que dijo?

El gran problema es que este señor, que anda despotricando contra quien lo apoyó y lo sacó del anonimato, es el mismo que participó desde un principio en la falta de cumplimiento de los compromisos contraídos por su organización con este pueblo pendejo y aun después de más de una década gozando de las mieles del poder, justo ahora es que pretende venir a desconocer su responsabilidad y echarle m… a todos aquellos que él acompañó y sigue acompañando. La verdad es que hay que tener la cara bien dura.

“Hasta tu Brutus” debe ser la expresión de quien fue su jefe, compañero, guía y paradigma. Se le viro como un buñuelo en aceite caliente, siendo precisamente el artífice, uno de los principales protagonistas de famosos préstamos, cuyo “empleo” es difícil de ver pero, cuyo pago, lamentablemente, se ha convertido en una dolorosa carga para las presentes y futuras generaciones. Algo así, como una deuda que heredaran eternamente. Cest la vie.

Mientras, todo continúa manga por hombro. Son políticos-dirigentes pero sin responsabilidad hacia los intereses del pueblo. Son dirigentes pero de postalitas, solo expertos en imagen mediática, donde a la hora de abrir la boca, todo tiene justificación, absolución e impunidad y si preguntan por la Señora aquella que les debe reclamar en nombre del país y que lleva por nombre Justicia, por igual le decimos que les pertenece, que la han convertido en algo menos que una prostituta, porque ella era ciega, ahora además es muda y sorda.

Todo nos lleva a pensar que estamos perdidos, que no hay esperanza de que alguien pueda detener este desastre institucional, si los que aspiran a dirigir han formado parte de todos y cada uno de los engranajes que nos han llevado a esta situación, donde todo se resuelve mediáticamente, con argumentos que ni ellos mismos se los creen e inclusive, muchas de estas argumentaciones son sustentadas por el principal protagonista del famoso déficit cuasi fiscal.

Y mientras las ambiciones desbordan su razonamiento y prosiguen endeudando el país sin misericordia alguna y el mismo hombre tiene el tupe de propagar que la pobreza ha bajado en este país, claro está, que muchos han bajado pero, a las fosas de los cementerios, otros, como los envejecientes del programa de alimentación suplementaria, reclaman que desde Diciembre no reciben las cuatro funditas de leche en polvo que recibían mensualmente. Vaya usted a ver cuál es la realidad, si la que dice el que ha despotricado contra el que fue su jefe y que además lo hizo jefe, o los envejecientes de la Barquita, por poner solo un ejemplo.

Pero la realidad y la verdad sobresalen del basural y se demuestra en determinados “elegidos” y mal agradecidos, que no deberían tener albergue en el conglomerado de hombres honestos, porque estos políticos luchan por tener el poder con el fin de conseguir el dinero que les permita satisfacer su ego, para su vanagloria, para hacerse los generosos. Algo así, como los narcos, con la diferencia de que estos buscan el dinero para conseguir el poder mientras los otros buscan el poder para obtener el dinero. Así nomas. ¡Sí señor!

El Nacional

La Voz de Todos